Un histórico del club fue homenajeado por su trayectoria como jugador, entrenador y sobre todo por su gran trabajo en las divisiones formativas. Una cancha del Jockey llevará el nombre de “Lonche” Perazolo.
José Luis Perazolo es un histórico miembro del Jockey Club Villa María.
“Lonche” jugó 12 años en primera división y luego se dedicó a formar jugadores y personas.
Durante este fin de semana se descubrió la placa en la cancha “La Lomita” que llevará su nombre.
El homenaje se realizó en el espacio que está al lado de la pileta donde entrenan los más chicos.
“Allí se forjaron grandes jugadores que marcaron una época y continúa el aprendizaje de las bases del club”, comentaron desde la institución.
Acompañado de su familia, dirigentes, jugadores del plantel superior y entrenadores, el propio “Lonche” hizo la inauguración.
Cargado de emoción dijo: “Estoy sorprendido y muy emocionado. Es mucho para mi, soy un agradecido a la institución”.
Hoy y para siempre la cancha de La Lomita llevará el nombre de José Luis Perazolo.
Para conocer a “Lonche” Perazolo
En una nota previa realizada por la prensa del club, Perazolo habló de su vínculo con la ciudad, su familia y el amor por el Jockey.
José, está casado con María Alejandra Mié y tuvieron tres hijos; Luciano (integrante de Rugby Infantil), María Pía y Carolina Manuela.
Además tiene tres nietos Camilo, Boris y Rufina.
José o más conocido por “Lonche”, llegó al club en 1977, su papá, era empleado de Banco y llegó de Córdoba para trabajar en la ciudad, así recuerda su llegada al club:
“Al club aunque sea irrisorio llegué caminando (risas), porque comencé a jugar en el club vecino por intermedio de mi papá que me hizo los contactos.
Él había jugado al rugby en Tala y siempre me hablaba del deporte pero siempre jugué al fútbol. Un día fui a entrenar con los vecinos y no había nadie, se había desintegrado la división.
Así que de regreso pasaba por la puerta de Jockey y estaban los hermanos Daniel y José Pérez que jugaban en el club.
Además del “Negro” Morales que nos conocíamos del Colegio Rivadavia y siempre me invitaba.
Entré, se armó una cuarta división y logramos el subcampeonato detrás de Córdoba Athletic. Nunca más me fui”.
