En el Anfiteatro no cabía ni un alfiler. Mujeres, principalmente, pero hombres también, cantaron y bailaron todo con Ricky Martin en su primer concierto sinfónico.
De La Rivera, la banda local elegida para la previa del show, subió media hora antes de lo que se esperaba, a las 20 horas.
Mientras el grupo empezaba a ponerle calor a la noche, la gente ingresaba al Anfiteatro que recibía por tercera vez a Ricky Martín.
Los músicos villamarienses tocaron aproximadamente media hora y agradecieron al público. “Es una locura”, dijeron antes de retirarse.
La espera seguía y fue minutos antes de las 21 cuando en el escenario ya aparecieron las imágenes de Ricky Martin y el anuncio del concierto sinfónico.
A la par, miles de personas seguían ingresando al coloso de cemento. Las filas, por fuera, eran de más de tres cuadras y se movian con facilidad.
El embotellamiento se generó por momentos dentro del Anfi, entre quienes debían ingresar a la platea baja y la vip.
21.15, ya el público había aplaudido tres o cuatro veces, como pidiendo el inicio del espectáculo.
Aparece Ricky
En ese instante aparecen en escena los más de 30 músicos: los integrantes de la orquesta y la banda propiamente dicha.
Comenzaron a preparar los instrumentos y dieron lugar a los primeros acordes que abrieron paso al esperado Ricky Martin que hizo estallar el Anfiteatro con “Pegate”.
“Yo vengo con cosas buenas para mi pueblo” cantaba el puertorriqueño mientras en el Anfi, en el que seguía ingresando gente, desaparecían poco a poco los pasillos por el furor de la gente que se levantó y los tomó para bailar.
Era un mar de gente, estallado. Antes de que empiece el show quedaban algunos lugares en platea alta, pero con el desborde que generó la aparición del cantante no se supo ya si tenían dueños.
Fue tras ello que Ricky saludó al público argentino. ¿Están listos para esta noche? dijo y aseguró que el estaba preparado.
“Vengo a pasarla bien, a recordar viejos tiempos que ame en el pasado, en el presente. Quiero que canten conmigo, que bailen conmigo”, expresó Ricky.
Un show extraordinario
El sonido, una maravilla. Se escuchaba perfecto y con gran calidad. La perfomance de la Orquesta Sinfónica también increíble.
Quienes piensan si se podía tocar algunos de los hits más movidos del cantante con una sinfónica, sepan que si. Se puede y sonó espectacular.
Ricky repasó todos sus mejores hits. Hay quienes dirán que faltaron algunos, pero lo cierto es que la carrera del artista es exitosa y no podría hacer todos sus temas en un concierto a no ser que dure horas.
A la hora salió unos pocos minutos del escenario y regresó con nuevo atuendo. En el Anfi no cabía ni un alfiler y hacía calor, por el clima y por la fiesta.
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También recibió del público una bandera de Argentina, la que besó y con la que se envolvió para cantar unos minutos. “Amo a Argentina”, dijo el artista.
Los momentos los manejó a la perfección, como sabe hacerlo un artista de su talla. Las canciones más melancólicas hasta las más arriba, sonaban en el Anfiteatro con una precisión absoluta en el manejo de emociones.
Así, sonó Disparo al Corazón, Livin la vida loca, Vente Pa’Ca, Vuelve, Fuego de Noche, La Copa de la Vida, Con tu nombre, entre otros hits.
El momento que se vivió con Asignatura Pendiente fue único. Pasaba la mitad del concierto aproximadamente cuando la sinfónica comenzó con sus acordes. Las primeras palabras de la canción por parte de Ricky hicieron estallar al Anfiteatro.
“Amo esta canción y es una de mis favoritas”, dijo en el medio y pidió volver a repetirla desde el principio. Se dio una conexión entre el artista y sus fans que quienes estuvieron seguro guardarán por siempre.
Ricky no se va
Luego llegó la primera despedida del artista. “Gracias por esta noche, nos vemos mañana”, dijo y salió en lo que el público pensó era el final y rápidamente comenzó a pedir otra más.
Así regresó Ricky, con otro cambio de ropa y cantó Tal Vez, para ganarse nuevamente el amor de su público.
El final de la noche se dió pasadas las 22.50 horas, cuando el artista se despidió con “Tu Recuerdo”, otro clásico.
Gran concierto que se repite
Hay quienes quedaron a la espera de más temas, pero lo cierto es que Ricky Martin cantó por poco más de hora y media. Cantó y bailó todo junto a una orquesta que sonó increible.
La primera noche de estos dos conciertos se vivió a pura emoción en el Anfiteatro que estaba colmado de mujeres y hombres también, de todas las edades, aunque principalmente de 30 años en adelante.
Fue una muestra más de la exitosa carrera de Ricky Martin, que brindó un concierto con humildad y con una técnica maravillosa que se repetirá este viernes 24, con entradas agotadas.
