El hallazgo de estupefacientes en bolsones que vinieron en rezagos aduaneros, fue decomisado por Gendarmería Nacional. Eran 15 kilos de cocaína, tapada con medias.
El viernes 15, trabajadores municipales se encontraron con paquetes de estupefacientes en bolsas que eran de rezago aduanero.
En principio, donde debía haber vestimenta y calzado, había también ladrillos con droga.
Ante está situación, el empleado municipal dio aviso y las autoridades realizaron la denuncia en la Secretaría de la Fiscalía Federal de Villa María, a cargo de María Marta Schianni.
La funcionaria pidió intervención a Gendarmería Nacional que, junto a la Unidad de Delitos Complejos llegaron al lugar, ubicado en avenida Perón.
Schianni indicó a Villa María Vivo que allí se le practicó a la sustancia un test reactivo que dio como resultado que se trataba de sustancia compatible con clorhidrato de cocaína.
“El peso aproximado son 15 kilos”, expresó.
En ese sentido, la fiscal agregó que se realizarán los estudios correspondientes con un perito químico.
“Son una serie de medidas y de maniobras sobre la sustancia para poder establecer con precisión y exactitud, los componentes y el grado de pureza”, expresó.
Estaban tapadas por medias
Desde Gendarmería Nacional detallaron que los uniformados corroboraron la existencia de 15 paquetes rectangulares compactados envueltos en cintas de embalar de diferentes colores.
“Se encontraban en el interior de dos bolsones de nylon que también contenían pares de medias”, informaron.
Los rezagos
Los rezagos aduaneros son aquella mercancía que, por motivos como impositivos o contrabando, entre otros, quedan retenidos en Aduana.
Luego de un período, se ponen a disposición del Estado Nacional para que haga uso de ellos.
Una práctica común que aquellos que contengan alimentos, vestimenta, calzados o elementos de bazar, sean solicitados por municipios u organizaciones para ser utilizados como ayuda social.
En este caso, la gestión anterior había solicitado rezagos, como ya lo había hecho en otras ocasiones, según pudo conocer este medio, y Nación autorizó a enviarlos el 7 de diciembre de 2023.
Se supo que los bolsones llegaron en febrero y que algunos ya habrían sido abiertos para su clasificación.
En aquellos, no se advirtió la existencia de ninguna sustancia.
Fue recién este viernes, cuando aparecieron los ladrillos con estupefacientes.
Con la investigación judicial, se realizará la trazabilidad para conocer y esclarecer el hecho