En la sede del Ente Intermunicipal para el Desarrollo Regional (Eninder) se realizó una reunión de trabajo en la que se continuó la evaluación del impacto ambiental, económico y productivo sufrido por la cuenca láctea a consecuencia del desborde del río Ctalamochita.
Se presentó un primer informe elaborado por el INTA que revela que se dañaron de forma directa 250 kilómetros de caminos rurales de red 2º y3º, por efecto de la inundación y/o vertientes cercanas a la superficie, y de forma indirecta otros 416 kilómetros de camino utilizados de manera alternativa para poder transitar.
Esta situación afecta un área en la que se encuentran 6 escuelas rurales (primaria y ciclo completo), 4 industrias lácteas y aproximadamente 135 productores, algunos con pérdidas importantes (en algunos casos totales) y otros con pérdidas menores o porcentajes de afectación bajo. Se trata de productores tamberos, ganaderos, agricultores y horticultores del cinturón verde aledaño a Villa María y Villa Nueva.
Asimismo, los participantes de la reunión resolvieron elevar una petición a la Subsecretaría de Lechería para gestionar la asistencia financiera para la reconstrucción de la red de caminos rurales secundarios y terciarios afectados.
La reunión de la que tomaron parte consorcistas, referentes de la industria láctea, de las cooperativas, del INTA, del Esil, del Cluster Quesero Villa María, de la Municipalidad de Villa María y del ENINDER, es la consecuencia de un encuentro similar, celebrado la semana pasada por convocatoria del Subsecretario de Lechería de la Nación Arturo Videla y los intendentes de Villa María, Morrison y Villa Nueva.