Junio es el mes de la fertilidad. Y en ese marco, nuevas investigaciones sobre células madre están tomando protagonismo en ese campo. En la Medicina Reproductiva, el uso de células madre ayuda a revertir la infertilidad en mujeres que presentan enfermedades que disminuyen notablemente su probabilidad de embarazo.
Uno de los casos es el del Síndrome de Asherman, una afección uterina por la cual las pacientes sufren de adherencias y cicatrices en el interior del útero; también se menciona la Atrofia Endometrial, una patología del útero que impide que el endometrio consiga el grosor necesario para concebir, y el fallo ovárico precoz, presente en el 10 % de las mujeres.
El Dr. Fernando Neuspiller, director del centro de fertilidad IVI en Buenos Aires, afirma que “las Células Madre Somáticas (CMS), que se encuentran en la capa basal del endometrio y serían las responsables de mantener su correcto funcionamiento ofrecen un prometedor poder terapéutico ya que se utilizarían con el fin de regenerar el endometrio en estas patologías. La terapia con CMS implica su inyección en las pequeñas arterias del útero. Los resultados del estudio han demostrado hasta el momento que casi todas las pacientes con Síndrome de Asherman y Atrofia endometrial mostraron una mejora en la cavidad uterina a los dos meses de haber recibido la terapia con células madre”.
Otro estudio desarrollado por la institución fue aquel en el que han logrado que “el ovario revierta su proceso de envejecimiento y active los folículos que se encuentran quiescentes, que de otra forma permanecerían en el ovario sin desarrollarse”, mencionó el especialista.
Hasta la fecha se han producido 4 embarazos bajo esta última investigación.