Este 1 de octubre se fue para siempre Mauricia Francisca Lobo a sus 106 años. Fue a las 10:55 por muerte natural a causa de su propia vejez.
Se encontraba internada en un clínica local y su gran corazón decidió que ya era hora de partir. Mauricia era la mujer más longeva de Villa María.
Era reconocida como un símbolo de vitalidad y apuesta hacia el futuro. La triste noticia fue dada a Villa María Vivo! por una de sus bisnietas.
Del norte cordobés
Mauricia nació en la localidad de Simbolar, un pueblo ubicado en el norte de la provincia de Córdoba, pero tras pasar también unos años en Río Segundo, se radicó finalmente en Villa María, por invitación de uno de sus hermanos, en el año 1950, contaron desde el Municipio.
“Tiene la mente de diez”, contó Ninfa Rodríguez, una de sus hijas, en una entrevista en el 2016.
“Le encanta hacer la comida. Pero quiere su calentador y su olla. Yo la ayudo, pero a ella le gusta ponerse a picar todas las verduras para la sopa”, relató en aquel entonces.
Tatarabuela
Mauricia tuvo siete hijos -de los cuales uno falleció hace algunos años-, ocho nietos y varios bisnietos. También se convirtió en tatarabuela, cuando nacieron las dos más pequeñas de la familia y a las que Mauricia no perdió oportunidad para tejerles ropa al crochet, otro de sus hobbies preferidos.
“A todos los que vienen a visitarla, les habla de religión”, contó su hija. La abuela profesaba la fe de los Testigos de Jehová, y con 104 años, va a las reuniones en la iglesia.
La creencia era su motivación para no quedarse en casa, para asistir a las celebraciones y compartir esos momentos con otros fieles.
Entierro
No habrá velorio y sus restos serán despedidos a las 10:00 horas en el Cementerio Parque La Naturaleza de Villa Nueva.