Tras las dos jornadas de lluvias, en las que se repitieron autos hundidos y calles inundadas, desde el municipio se admitió que no hay muchas posibilidades de darle una solución de fondo ante futuros fenómenos meteorológicos similares. Sólo la realización de obras multimillonarias podrían ayudar a que las casas no vuelvan a sufrir anegamientos con lluvias fuertes.
“Hubo inconvenientes, pero sucede llovieron más de 150 milímetros en dos oportunidades
En barrios como el Felipe Botta, donde la obra de cloacas era más reciente, la zanja no resistió la compactación y al pasar un vehículo se hundió, pero no son grandes inconvenientes”, observó el jefe de Gabinete, José Carignano.
“No hay canal ni desagüe que soporte semejante caudal de agua. Son recurrentes estos fenómenos en alguna oportunidad del año y es muy difícil solucionar. Habría que hacer obras sumamente importantes, de varias decenas de millones de pesos, para morigerar los efectos o tener una solución global”, reconoció el funcionario.
Los barrios que en las últimas semanas sufrieron inundaciones, volverán a tener el mismo problema ante cada lluvia abundante, porque la solución no está por ahora a la vista. Sólo parece ser posible tomar medidas para evitar que los daños sean menores.
