La propia congregación de la Iglesia Biblia Abierta Misiones Globales de Argentina decidió concluir con toda actividad en la localidad de Las Perdices y emitió una solicitada en la que rechaza todo tipo de abuso en contra de las personas.
De esta manera se tomó una decisión contundente, en consonancia con lo que viene actuando la Justicia, que mantiene detenido y acusado de varios casos de abuso sexual a quien fuera el pastor principal de esa iglesia, Víctor Paredez.
Final del culto
De acuerdo a una solicitada publicada en El Diario, la mesa ejecutiva de dicha iglesia decidió un cierre “por tiempo indeterminado de la congregación” en Las Perdices y puso fin a todas las actividades, religiosas y de cualquier índole.
La conducción nacional de esta iglesia evangélica explicó en el texto que tomó esta decisión a raíz de las denuncias por abuso sexual que llevaron a detener al pastor Paredez.
También se expresó un rechazo a todo tipo de abuso contra las personas y se solidarizaron con quienes fueron presuntas víctimas del accionar de este hombre, ofreciendo su apoyo y su predisposición para colaborar con la Justicia.
Alivio para las víctimas
Esta manifestación de parte de la iglesia puede ser tomado como un alivio y un reconocimiento a las personas que se animaron a denunciar los abusos. En la comunidad evangélica a la que pertenecían, según contaron en más de una ocasión, fueron cuestionados por otros fieles y por el entorno del pastor acusado.
Pero este aval de la cúpula de la organización religiosa, más la confirmación hasta ahora de todo el proceso judicial en contra del acusado, puede resultar un alivio, en algún modo, para los denunciantes.