La ciudad de Villa María participó de una reunión del Consejo de Mercociudades, que sesionó en forma virtual.
El encuentro fue bajo la temática “Visión y perspectiva de los gobiernos locales, situación social y económica actual y en la post pandemia”.
Por Villa María participó Pablo Rosso junto a representantes de gobiernos locales de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú, Colombia y Uruguay.
En el marco de esta reunión, las ciudades que integran esta red reafirmaron la importancia de fortalecer las políticas de atención y asistencia a las poblaciones más vulnerables en el contexto de la pandemia de covid-19.
Los miembros de la red trataron un aporte realizado por Villa María, como miembro de la Red de Ciudades del Aprendizaje de UNESCO. Precisamente, Rosso expuso la posibilidad de llevar adelante un convenio de vinculación entre ambas redes, de manera de trabajar mancomunadamente cuestiones vinculadas a lo educativo.
Mercociudades es la principal red de ciudades de Sudamérica con 350 localidades miembros. La participación local está articulada a través de la Dirección de Relaciones y Cooperación Internacional del municipio.
Documento final
Todas las localidades participantes emitieron un documento en el que destacan tres importantes demandas para facilitar y mejorar el accionar de los gobiernos locales en toda la región: profundizar la autonomía local; atender la necesidad de financiamiento de los gobiernos locales; y fortalecer la integración regional.
Estas demandas y propuestas se asientan en las necesidades identificadas por gobiernos locales de todo el continente, y ya se han expresado en declaraciones anteriores emitidas al Mercosur, la alianza regional más importante de países en América del Sur.
Teniendo en cuenta la cercanía de las administraciones locales con las necesidades del territorio, las tres propuestas alertan sobre la necesidad de cumplir con las demandas cotidianas de las ciudades: atender a los colectivos más vulnerables, cuidar de la salud, fomentar el desarrollo cultural, ambiental, social y económico de las comunidades.
Respaldaron esta declaración las ciudades de Avellaneda (Santa Fe), Buenos Aires, Córdoba, General Alvear, San Justo, Santa Fe, Villa María, Esteban Echeverría y Tandil de Argentina; Porto Alegre, Santana de Parnaíba, São Leopoldo y São Paulo de Brasil; Asunción y Lambaré de Paraguay; Canelones y Montevideo de Uruguay; La Paz y Tarija de Bolivia; Medellín de Colombia; Peñalolén, Puerto Montt y Quilpué de Chile; Parcona de Perú; Cuenca y Riobamba de Ecuador.