Nora Lilián Abelleira de 59 años había sido condenada a cadena perpetua por mandar a matar a su esposo en 2011. Tras un juicio, se la encontró culpable del delito de homicidio calificado por promesa remuneratoria. La prisión perpetua la cumplía de forma domiciliaria a causa de un cáncer que arrastraba desde hacía varios años.
El martes 21 de noviembre se conoció la noticia de que la mujer falleció a causa de esa enfermedad. “Se fue a la tumba sin que todo se conozca con certezas en audiencia oral y pública”, informa el diario Puntal Villa María en su edición de este miércoles 22.
Enrique “Quique” Espósito, empresario lácteo y uno de los herederos de la fábrica Natalio Alba SA, fue la víctima de la mujer.
Según indica ese medio, tras la muerte se registraron importantes movimientos inmobiliarios, compras de oro y transferencias de titularidades que llevaron a la detención de Abelleria y de José Deheza en diciembre de 2018.
El abogado en representación de los hermanos del esposo, José Luis Bertoldi, aseguró estar convencido de que contrató a Deheza para el asesinato.
“Abelleira nunca declaró, se abstuvo de declarar en fiscalía. Lo hizo en la audiencia de debate y esos dichos ahora son nulos. Ya no pueden ser tomados en cuenta, pero sólo se desvinculó a ella. A Deheza ni lo nombró”, indicó el abogado quien aseguró que “ahora se cierra la causa para ella con un sobreseimiento por muerte”.
Explicó que este año ya no hay tiempo para hacer la audiencia, pero que se hará el año que viene.
Qué pasa con Deheza
José Deheza de 52 años fue absuelto por el homicidio calificado por promesa remuneratoria del que se lo señala como autor material del hecho.
Lleva 4 años y 6 meses con prisión preventiva, sin tener sentencia. El único fallo, explica Puntal, fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia y lo condenaba a 5 años de cárcel por delito de amenaza y coacción.
Al conocer la noticia de la muerte de la mujer, el abogado del hombre, Eduardo Rodríguez pedirá el cese de la prisión.
Fuente: Puntal Villa María
Foto: Archivo Villa María VIVO!
