Un dato curioso surgió de observar las fotos que la Policía de Córdoba difundió sobre un caso de un vehículo que chocó a dos adolescentes en bicicleta, y luego escapó del lugar, aunque minutos más tarde fue entregado por su propia madre a los uniformados como el responsable del choque.
El dato llamativo fue la presencia de una botella de fernet dentro de un copón rojo que se encontró junto a una de las bicicletas atropelladas. Esas bicis eran manejadas por dos chicos de 14 y 15 años, que alrededor de las 17:30 del domingo circulaban por calle Córdoba del barrio La Floresta en Villa Nueva.
En esa arteria se registró el incidente de tránsito con una camioneta Ford EcoSport color negro, conducida por Nicolás Ponce, de 19 años de edad. En ese momento, el joven escapó del lugar, pero como el vehículo fue localizado en su casa, fue su madre quien lo puso en manos de la Policía.
Lo que no pudo precisarse desde la Policía en ese momento, es a quién pertenecía la botella de fernet que se ve en la foto, y que fue secuestrada como parte del procedimiento, según indicaron desde la Departamental.
Esto abrió algunas especulaciones:
Una es que podría tratarse de una bebida que era llevada dentro de la camioneta, y que tras el impacto se cayó o fue arrojada a la calle.
Otra posibilidad es que esa botella en realidad hubiera estado allí desde antes del incidente, teniendo en cuenta que se trata de una zona en la que funcionan boliches en las cercanías. También podría haber sido arrojada por un vecino o transeúnte horas antes.
La tercera opción sería que era llevada por los niños que circulaban en las bicicletas, lo que podría asociarse por lo cerca que quedó el envase de una de las bicis averiadas.
“Se secuestró todo, pero eso lo va investigar el ayudante fiscal para ver si los menores la llevaban con ellos”, confió una fuente policial sobre la botella, por ahora sin dueño conocido, que quedó tirada en la calle, sin romperse, y todavía con algo de fernet adentro.
