Se suman más historias de perros en la calle que buscan un hogar. Las crudas palabras de Silvina Damiani, ayudan a tomar consciencia de que Sofi y Negro merecen una familia.
Son cientos de perros que divagan por las calles de cada barrio de Villa María.
Pero, más aún, se ven perros medianos y grandes, de colores marrones o negros.
Según la experiencia de las proteccionistas, es difícil que los adopten “sobre todo cuando no son el tipo de perros que la mayoría de la gente busca, que es el perro chiquitito o peludo”.
La historia de Sofi
A Sofi la encontraron hace aproximadamente siete meses. Se estima que actualmente tiene menos de un año y medio.
En ese momento estaba preñada y muy deteriorada, se estima que era su primer celo. Su estado era de desnutrición y deshidratación.
Sus cachorritos nacieron débiles y enfermos por el estado que tenía Sofi, y finalmente no se pudieron salvar.
Ahora, la perrita está castrada y recuperada, pero intenta sobrevivir a la calle.
Desde hace dos meses, Silvina Damiani junto a otros amantes de los perros, le dan de comer, y le están buscando hogar.
Un corazón que la elija
“La encontramos en la calle vagando, luchando por un poquito de comida. Es súper cariñosa, sociable, buena y muy dulce”, contó.
“En la calle no se vive, se sobrevive. Los perros deambulan por un pedacito de comida, y pelean entre ellos para ver quién se queda con ese pedacito que lograron encontrar. Esta perrita no sabe pelear porque es muy mansita y le cuesta un montón sobrevivir en la calle”, explicó Damiani.
Describen a Sofi como una perrita “común estéticamente”. Sin embargo, se caracteriza por ser inteligente.
“Entiende todo. Es muy cariñosa y se lleva bien con perros, gatos, niños y adultos. Esa es su gran ventaja. El tema es que alguien mire eso y no solamente la estética. Queremos llegar a algún corazoncito piadoso que la elija“, dijo emocionada la proteccionista.
Además, Damiani detalló qué hacen ante estos casos: “cuando encontramos un perrito como Sofi, le pagamos guardería hasta que le conseguimos casa, pero hoy es un costo de por lo menos $10.000 por mes, y a eso hay que sumarle balanceado, pipeta… y ya tenemos a otros perros pagándoles guardería y no tenemos los medios para seguir haciéndolo más”.
Finalmente, enfatizó en el apuro de encontrar adoptantes: “Ahora ya se viene el invierno y las noches crueles de helada y queremos encontrarle una casa sí o sí a Sofi por lo difícil que es sobrevivir. Va a tener una adoptación súper rápida en cualquier hogar que le den un poquito de cariño”.
La historia de Negro
Además, Damiani compartió la historia de Negro.
Es un Pastor belga, de dos años aproximadamente.
“Es precioso, tiene un pelaje y unos ojos dorados divinos. No tiene nombre, le dicen Negro y vivió siempre en la calle. También se trató de retener, pero con patio abierto el perro no se queda, va y viene”, comentó sobre este caso la proteccionista local.
Actualmente se le da de comer entre vecinos cuando lo ven.
“Tiene la ventaja de tener raza, que eso a veces la gente lo busca mucho. Es muy hermoso y al Pastor belga lo caracteriza el ser muy inteligente, noble, compañero y fiel“, destacó Silvina Damiani al hablar de Negro.
Para adoptar a Sofi o Negro, comunicarse con Silvina Damiani por WhatsApp al +5493534112906