La Usina Cultural abrió sus puertas desde la tarde del martes 28 en la vieja Casona Sobral, gestionada conjuntamente por Municipalidad de Villa María, Universidad Nacional y Biblioteca Bernardino Rivadavia.
El intendente Martín Gill dijo: “hace mucho pensábamos en una Usina Cultural, que se albergue en el corredor cultural principal de la ciudad, un corredor único, que en pocos metros concentra cultura, tecnología, música, teatro, libros, pensamientos, ideas y cine”.
“Es algo maravilloso que debemos aprovechar”, enfatizó, en referencia al conjunto del Parque de la Vida.
Con este espacio, sumado al Centro Cultural Leonardo Favio, la Tecnoteca y la Medioteca, se referza el polo cultural, artístico y educativo en el sector del subnivel ferroviario.
“Por eso decimos que Villa María se ha transformado en un polo cultural del interior de la provincia. Esto tiene que ver con el lugar que la educación, el aprendizaje y la cultura, ocupan en la vida de la ciudad”, continuó el titular del Ejecutivo Municipal.
El rector de la casa de altos estudios, Luis Negretti, agregó que será un espacio “de mixturas, donde se van a entremezclar distintas expresiones artísticas, donde se va a poder visibilizar el arte. Este va a ser un espacio donde vamos a encontrar agenda cultural, y donde se va a poder proponer acciones y actividades”.
La directora de la flamante institución, María Laura Gilli, resaltó el valor histórico del lugar y dijo que la antigua casona “es un sitio histórico urbano, que manifiesta una multiplicidad de acciones culturales vinculadas a la creatividad. Es un espacio histórico con mucho valor simbólico, y caro a los afectos y sentimientos de los villamarienses”.
Fotos: Municipalidad de Villa María.
