El Ministerio de Transporte de la Nación implementará cambios en el manejo del tren de carga que pasa por Villa María.
Por un lado, rechazó prorrogar de la concesión ferroviaria de la línea Mitre a la empresa Aceitera General Deheza (AGD).
Al mismo tiempo se decidió implementar un proceso de transición para que, a partir de 2022, sea la empresa estatal Trenes Argentinos de Carga (TAC) la que opera este ramal.
Los plazos establecidos para implementar un esquema de transición no son menores a 10 meses.
Por lo tanto, habrá que esperar hasta mediados de 2022 para ver qué cambios habrá en el manejo del tren de carga que pasa por Villa María.
Si bien se construyó el paso subnivel del centro para agilizar el tránsito de un lado a otro de la ciudad, el tren de carga que pasa por Villa María suele generar grandes demoras en distintos horarios.
Cuando su paso se produce cerca del mediodía, los embotellamientos y trastornos en el tránsito vehicular son más notables.
Aparte de esta situación, hay innumerables casos de accidentes ocurridos en relación a este servicio, generalmente por cruces de otros vehículos como autos y motos sobre las vías.
El tren de carga
La AGD, de la familia Urquía, tiene a su cargo el Nuevo Central Argentino (NCA), en una red de la línea Mitre que pasa por Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero y Tucumán.
La empresa aceitera había tomado el control del negocio en el año 1992 y el contrato vencía a fin de 2022, publicó La Voz del Interior.
Aparte de la operación de los trenes de carga, la administración de la infraestructura ferroviaria y de la totalidad de los bienes estará a cargo de Trenes Argentinos Infraestructura.
La resolución 211/2021, publicada en el Boletín Oficial con la firma del titular de Transporte, Alexis Guerrera, rechazó el pedido de prórroga contractual efectuado por las empresas Ferroexpreso Pampeano, Nuevo Central Argentino y Ferrosur Roca.
Al mismo tiempo asignó los servicios a TAC en la etapa inicial de transición, para avanzar hacia un modelo de uso abierto con participación público-privada, se explicó en La Voz.
El Ministerio de Transporte fundamentó su decisión en el análisis de la Comisión Especial de Renegociación de Contratos de la cartera nacional.
La conclusión fue que “las concesiones ferroviarias de cargas arrojan, al cabo de casi 30 años, un balance negativo en términos de estado de la infraestructura (velocidad y ramales perdidos)”.
La comisión recomendó el rechazo de las solicitudes de prórrogas, tras señalar que la experiencia de Trenes Argentinos Cargas indicaría que el desarrollo del sistema ferroviario nacional y el incremento de su participación en la matriz modal “dependen de una concepción y una administración integral de dicha red”.
Por tal motivo, se instruirá a esa empresa para que continúe con la explotación de los servicios ferroviarios hasta el 30 de junio de 2022.
El rechazo de las prórrogas de los contratos de concesión implica la reasunción de la administración de la infraestructura ferroviaria nacional y la totalidad de los bienes que forman parte de los contratos de concesiones.
Esto será una vez vencido el plazo de cada una de ellas, por parte de Trenes Argentinos Infraestructura, concluyó un comunicado de Transporte.