La secretaria de Economía y Finanzas, Daniela Lucarelli, presentó el proyecto de ordenanza Tarifaria para el año 2017 en el Concejo Deliberante de la ciudad.
La novedad en la Tasa de Servicio a la Propiedad es que se crearon dos nuevas zonas, comprendiendo en una de ellas a los contribuyentes que soliciten la Tarifa Social, creada para 2017. Tiene un valor simólico de 50 pesos finales por bimestre, lo que representa un total de 300 pesos al año.
La Tasa de Industria y Comercio también contempla la Tarifa Social para aquellas actividades comerciales de pequeña envergadura.
“En general, son comercios radicados en lugares más periféricos, que tienen la voluntad manifiesta de pago pero a los valores actuales no podían cumplir con los tributos”, comentó la funcionaria de Economía.
Ratificó tope del 20%
“Se trata de una Tarifaria sumamente moderada y conservadora en cuanto a incrementos para los cuales se prevé un tope del 20% en los tributos y, en algunos casos, el promedio da como resultado un porcentaje inferior”, resaltó la titular del área, tal como lo había anticipado en la presentación del Presupuesto 2017, a comienzos de esta semana.
Lucarelli destacó que para la presentación de esta iniciativa, se realizó un intenso trabajo de actualización de la zonificación de la ciudad, que implicó un relevamiento en todo el ejido urbano, “calle por calle y cuadra por cuadra, registrando cuáles son los servicios y frecuencias que efectivamente se prestan y cuál es la infraestructura existente”.
Recálculo
Asimismo, la funcionaria dijo que se hizo una actualización de la valuación de los inmuebles, tarea que estuvo a cargo de inmobiliarias que previamente ganaron un concurso para desarrollar ese trabajo. “Esto permitió hacer un recálculo de la tasa eliminando algunas distorsiones que se habían encontrado y atendiendo además a demandas por parte de los contribuyentes afectados por estas inequidades”, expresó.
“En los incrementos, consideramos que la Tarifaria es conservadora porque hemos sido cautos, garantizando sí la autosustentabilidad financiera. Lo que buscamos es mantener un equilibrio: por una parte, comprender el contexto socioeconómico actual y en ese sentido impactar lo menos posible en el bolsillo del contribuyente de Villa María. Y, por otra parte, garantizarle a ese ciudadano la prestación de servicios, el desarrollo de obras, de infraestructura y demás programas que la ciudad viene desarrollando, que planificó para el año 2017 y que se van a poder ejecutar, fundamentalmente, con recursos genuinos”, destacó.
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