Desde agosto, un nuevo espacio para rehabilitación de adicciones abre sus puertas en la región.
De la mano del Obispado de la ciudad de Villa María, La Fazenda de la Esperanza se instaló en la zona rural de Morrison. El predio de 34 hectáreas fue donado por los religiosos y albergará a 60 jóvenes aproximadamente.
Por estos días, el grupo de voluntarios integrado por latinoamericanos y de otras provincias del país, refaccionan el predio en el que funcionaba una escuela agrícola. Allí hay una capilla, edificio con cocina, baños, sala y dormitorios.
Ellos se denominan como: “Una asociación de fieles reconocida por la Iglesia católica, llamada Familia de la Esperanza”, y su trabajo se da en diversos campos sociales, pero el principal es la recuperación de jóvenes químicos-dependientes.
El objetivo de La Fazena es acompañar a quienes lleguen “con el deseo de recuperarse del flagelo de las drogas”.
El proyecto llega desde el país limítrofe del Brasil, en donde hay alrededor de 70 sedes de la organización. En cada una de ellas, los internos trabajan en diferentes proyectos de artesanías, panificación, agricultura y demás.
En portugués, el idioma brasilero, el término Fazenda significa granja.
La inauguración oficial está prevista para el sábado 19 de agosto. Mario Vera, un voluntario de Paraguay, será el responsable de llevar a cabo la misión desde Morrison junto a misioneros.
El grupo está conformado por voluntarios que fueron internos tiempo atrás y decidieron ayudar al prójimo y miembros del Grupo de Esperanza Viva (GEV) que trabaja en Villa María desde hace algunos años.
La llegada de la Fazenda de la Esperanza a la Diócesis surge como una respuesta ante la invitación del Papa Francisco en el año de la Misericordia para que en las parroquias, diócesis y comunidades se materialice alguna obra de misericordia.
La organización, una comunidad de inspiración franciscana y focolar, se suma a otras comunidades terápeuticas y eclesiales presentes en la diócesis: “Asociación Nazareth” (presente en Villa María y en Bell Ville) y la asociación Civil “Nuestra Señora de Luján” (presente en Río Tercero), articuladas eclesialmente por la Pastoral de adicciones y drogadependencia
En Villa María, los días miércoles a las 20:00 en el predio ubicado al lado de la Catedral, se reúnen el grupo GEV para ayudar a quienes desean comenzar un camino de rehabilitación.
Fotos: fazenda.org.ar