El Escuadrón Villa María de Gendarmería Nacional dispuso la incineración de los 64 bagres incautados en un procedimiento que tuvo lugar en la tarde del domingo en la ruta provincial 4.
La destrucción de las piezas secuestradas se hizo frente a testigos en la sede de Gendarmería, luego que se detectara una situación que infringía la ley provincial de fauna y la ley de Senasa sobre el transporte de alimentos perecederos.
En el caso de los bagres incautados mientras se hacía un control vehicular, se detectaron varias anomalías.
Sin condiciones de frío
Una de ellas tuvo que ver con las condiciones en las que eran transportados los pescados, ya que se los llevaba dentro del baúl de un auto, sin ningún sistema de refrigeración ni preservación.
En el caso de transporte de elementos que puedan estar destinados al consumo humano, debe garantizarse la cadena de frío.
De las tres personas que iban en el vehículo, ninguno portaba habilitación para pesca deportiva.
Por último, la cantidad de piezas secuestradas son consideradas pesca masiva por la ley provincial de fauna, lo que constituye otra infracción más.
Desde Gendarmería Nacional, el comandante Héctor Álvarez González, explicó que la repartición realiza controles vehículares en rutas nacionales y provinciales, y que ante cualquier irregularidad debe actuar, que fue lo que ocurrió en este caso, en el que detectaron la presencia de piezas de pesca en gran cantidad, sin condiciones adecuadas de transporte, y sin autorización para su pesca.
Foto: Archivo.