[GALERÍA DE FOTOS] Hace más de un año que la vera de la ruta 158 se convirtió en una laguna maloliente. Y la contaminación no pasa desapercibida para quienes transitan diariamente por la zona.
Se ubica al costado derecho de la arteria, camino a la Autopista, donde termina el barrio Solares del Norte.
Lejos de la sustentabilidad, un vecino contó que “es un oasis de contaminación a cielo abierto”.
Explicó que después de algunas obras, habrían dañado un caño cloacal y que “poco a poco fue emergiendo a la superficie”.
Reclamos
Al principio, efectuó la queja a la Cooperativa de Aguas y Cloacas pero le dijeron que agendarían el reclamo.
Mientras tanto, los meses continuaron pasando y el charco se convirtió en una laguna de aguas negras.
Hace poco volvió a la Coooperativa y esta vez le dijeron que no se ocupaban de esos temas. Fue derivado al Municipio.
Lo enviaron a la secretaría de Ambiente e Infraestructura, pero nuevamente volvieron ignorar el pedido.
“Hoy la laguna no es tan chiquitita, ni tan aromática. No pasa desapercibida de quienes ingresan a la ciudad. No es agua de lluvia acumulada ni una fuente ornamental. Es un oasis de contaminación a cielo abierto”.
Comentó que del otro lado de la ruta también se forman lagunas, pero son por causa de la lluvia abundante.
Fotos y fuente:Lector que trabaja en la zona