La Ley Electoral designa que la edad límite de obligatoriedad para emitir votos es de 70, pero en la escuela República de Paraguay encontramos algunos adultos mayores que lo mismo se acercaron a las urnas.
Margarita llegó acompañada de su hijo (foto principal). Tiene 75 años y vive en el Hogar de Ancianos local. Comentó a VILLA MARÍA VIVO que “a nosotros nos invitó la directora a venir. En realidad yo ya no tenía obligación, pero nos dijeron que hay que hacerlo lo mismo”. Su hijo explicó que “yo porque puedo acompañar a mi mamá, pero a los otros abuelos los cargan en una traffic”. Si bien no especificaron los términos de la invitación de la directora, dejaron entrever que se trataría de una sugerencia imperativa.
Carlos y Adelma son un matrimonio que a las 9 llegó a la institución de calle Chile. Ambos tienen 73 años. La mujer relató a VILLA MARÍA VIVO que “no ibámos a venir por el frío, pero a último momento decidimos usar nuestro derecho. Hemos pasado por tantas en este país, que ahora que podemos votar, lo hacemos”.
Miguel tiene 70 años y un problema en sus piernas que lo llevan a dirigirse con un bastón. Fue solo a sufragar y a pesar de su dificultad, subió las escaleras de la escuela, porque su mesa estaba en la planta alta. El hombre adujo que “mi hija me dijo que ya no tenía la obligación de venir porque estoy justo al límite, pero a mí me gusta colaborar en algo. Nunca milité en ningún partido, aunque cuando era joven me gustaban los radicales”.
Respecto a su posibilidad de manejarse solo dijo que “tengo el bastón para ayudarme, pero en casa también tengo escaleras así que estoy acostumbrado. Voy despacito y llego”.
Fotos: VILLA MARÍA VIVO