Los hijos y hermanos de Alicia Copa llegaron a Villa María para retirar el cuerpo, buscar a los dos hijos menores de la mujer asesinada por su ex, e hicieron un pedido especial para que el hombre de su madre, víctima de femicidio, perdure en la memoria del barrio La Calera.
Los familiares de la mujer fallecida manifestaron su voluntad para que la vivienda que fue escenario del lamentable hecho se convierta en un centro de contención y ayuda a mujeres víctimas de violencia de género, amenazas y golpes.
Su intención es firmar un convenio con el comedor Caritas Felices, de Marisa Sanchez, para que se puedan dictar talleres gratuitos para niños y mujeres, y brindar ayuda.
Por unos meses, la casa estará a disposición de una mujer que tiene 5 hijos y no cuenta con un lugar donde vivir. El municipio está terminando una vivienda para esta familia y una vez que se mude a ese lugar, se podrá empezar a trabajar en el nuevo destino de la casa de Alicia.