En la madrugada del jueves 22 de mayo la Policía tomó conocimiento por medio de un llamado anónimo que había un hombre tirado en la calle en la localidad de San Francisco. Pero cuando llegaron al lugar encontraron una imagen impresionante.
Había un joven maniatado a una cruz de madera clavada en la tierra. El muchacho tenía la cabeza envuelta con cinta de embalar transparente. Le habían dejado dos orificios: uno en la boca, el otro en la nariz. Sus manos y pies estaban fuertemente atados a los tablones de pino, con la misma cinta. A la altura del estómago, tenía un papel con la leyenda: “No robarás”.
Se trata de Víctor Robledo de 27 años, es oriundo de Frontera, un pueblo de la jurisdicción de la provincia de Santa Fe, vale aclarar que entre este lugar y San Francisco hay sólo una calle de diferencia.
Tras ser rescatado por policías cordobeses fue trasladado al Hospital Regional Iturrase, presentando principios de hipotermia y lesiones leves propias de los golpes que recibió.
Sólo ha realizado una declaración informal, pero dice tener miedo de explicar lo sucedido, ya que una de las posibles versiones del hecho es que los responsables serían los policías de Frontera. Cabe aclarar que el joven tiene un frondoso prontuario en Santa Fe, pero ningún antecedente en San Francisco.
Fuente y foto: La Voz del Interior