Villa María fue mencionada como una de las ciudades del interior del país más apetecible para una de las marcas de zapatos de alta gama del país. Las elegantes botas, zapatos y botinetas de Saverio Di Ricci tienen a esta ciudad entre sus destinos preferidos, por lo que parece que a las mujeres villamarienses les gusta calzarse bien y no reparan tanto en el precio.
Al dato lo dio nada menos que Horacio Di Ricci, el heredero y mentor de un imperio que inauguró su padre en los años 70 y que, con su visión del negocio, llegó al reconocimiento de las principales vidrieras del país.
“Vendemos mejor en el interior”
“Vendemos mucho mejor en el interior del país. Si me preguntás por la Argentina, te contesto que está muy dividido el consumo. El público de alta gama no cambia sus hábitos y, si les gustan los Saverio, compra en todo momento”, resumió el comerciante zapatero Di Ricci en una entrevista con el diario La Nación.
En su visión, dijo, “Villa María en Córdoba y Tucumán son grandes puntos de venta” fuera de las principales galerías y shopping de Buenos Aires.
Del garage al shopping
Horacio Di Ricci lleva cuarenta años en el negocio. Se hizo cargo a los 20, cuando murió su padre Saverio.
Lo que sería con los años una de las marcas más reconocida del mercado, comenzó en un garage de una casa en la avenida Álvarez Jonte y Ruiz de los Llanos, en el barrio porteño de Versalles.
Hoy es una marca de calzado de alta gama, “una de las últimas que queda actualmente en el país”, remarca Di Ricci.
Cuentan con una fábrica y dos locales propios de venta al público, más una plataforma online. Sin embargo, aclara, el gran canal de ventas de sus calzados se reparte en más de 100 multimarcas distribuidos en todo el país. Y ahí es donde Villa María aparece como una de las plaza más codiciada para marcas de alta gama como esta.