Las estadísticas del Registro Civil de Villa María son elocuentes: cada año que pasa, la gente se casa menos y se divorcia más.
¿Se termina el matrimonio como institución? ¿Las nuevas parejas prefieren otra forma de sellar su vínculo? ¿O los vínculos ya no son lo que eran?
La tendencia
Cuatro años atrás, la cantidad de casamientos registrados en Villa María triplicaba a los divorcios.
Durante 2018, la tendencia marcó un cambio contundente: Los divorcios superaron en un 16 % a los matrimonios.
En Villa María, es más la gente que se divorcia que la que se casa.
Uniones y desuniones
Finalizado el año 2018, la cantidad de matrimonios registrados en Villa María fue de 180, en tanto que la cantidad de divorcios fue de 209.
La diferencia sería mayor aún si no fuera por la vigencia del matrimonio igualitario, modalidad que aportó tres casos al bando de las uniones legales.
En perspectiva, puede verse cómo, con el paso de los años, la cantidad de casamientos fue disminuyendo, mientras que la de divorcios fue aumentando.
Los números cada año
En 2014, por ejemplo, se anotaron un total de 292 casamientos, contra apenes 98 divorcios, según los datos del propio Registro Civil.
Mientras que en 2016, dos años atrás, las parejas que se unieron mostraron una reducción, llegando a 262.
Como contrapartida, hubo un crecimiento de los divorcios, que llegaron a 130.
Ahora, en 2018, se confirmó la tendencia, y son más los que disuelven la sociedad marital que quienes la forman.
¿Qué pasará?
Los números parecen mostrar que, con el paso de los años, el matrimonio podría pasar a ser una rareza.
El último año hubo entre dos o tres por semana, cuando en 2014 se celebraron casi uno por día.
En paralelo a esto, el aumento de los divorcios muestra que, sobre que hay menos uniones legales, se incrementa la disolución de las que estaban formalizadas.
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Foto: Ilustrativa.
