El Concejo Deliberante de Villa María, por mayoría y por cuarta vez consecutiva, aprobó licencia de Martín Gill a su cargo de intendente la ciudad.
El debate se dio en una caldeada sesión en la que el oficialismo y la oposición contrapusieron sus argumentos para votar, unos a favor y otros en contra, del nuevo permiso solicitado.
Martín Gill pidió se le otorgue una nueva licencia para su cargo de intendente mientras se desempeña como secretario de Obras Públicas de la Nación.
La mayoría aprobó la licencia
Finalmente, al momento de votarse, las bancadas oficialistas de Hacemos por Córdoba y Somos levantaron las manos a favor (7 votos), mientras que el bloque opositor Vamos Villa María lo hizo en contra (5 votos).
Primera parte de la sesión:
Segunda parte de la sesión:
La sesión estuvo enmarcada por una manifestación de integrantes de partidos minoritarios que se oponen a la renovación de la licencia del mandatario.
Los cruces entre el oficialismo y la oposición
Por el lado del oficialismo, el vicepresidente a cargo de la presidencia del Concejo, Carlos De Falco, fue quien argumentó a favor de renovar la licencia.
El concejal fue quien sostuvo los puntos jurídicos de la posición de la mayoría para otorgar una nueva licencia.
También, como en otras ocasiones, se hizo una defensa política por parte de los distintos ediles del bloque mayoritario, destacando las obras que Gill, desde la Nación, gestiona para Villa María y la región.
Entre los contrapuntos, el concejal Julio Oyola apuntó hacia la oposición, desafiándolos a que acudan a tribunales para dirimir las razones.
“Creo que nuestra Carta Orgánica quedó vieja. Hoy Villa María está grande y tenemos que renovarla. Esta discusión semántica legal (sobre la licencia) no la vamos a solucionar nosotros”, dijo.
“Se debe concurrir ante la Justicia. Hace 2 años que vienen prometiendo que van a ir”, agregó.
Desde la oposición, una de las que replicó fue Karina Bruno, quien dijo que le resulta difícil volver a buscar argumentos nuevos, no repetidos anteriormente.
“Hay cuestiones jurídicas que son insoslayables. Están claros los artículos”, dijo Bruno sobre lo que define la Carta Orgánica en relación a la licencia de quien ocupa la intendencia.
Señaló Bruno que la decisión de Gill “impacta en la conducción de la ciudad” y puso como ejemplo que “hay sectores que todos los días reclama respuestas del gobierno municipal”, y no los encuentra.
“Hay reflejos de lo lejos que están de lo que le pasa a la gente”, disparó hacia el oficialismo. Apuntó también contra la interna peronista, cuestionando también al bloque Somos.
Dijo que es “imposible” acompañar una licencia como esta, y que la “cuerda es cada vez más finita”.
La sesión, como las anteriores por las otras licencia, contó la participación de la mayoría de los concejales. También hablaron Verónica Vivó y Paula Miozzo por el oficialismo, y Romeo Benzo y Luis Caronni por la oposición.
Las argumentaciones en contra de la licencia contaron desde las gradas y desde la calle con quienes se manifestaron en desacuerdo de la licencia.