- Maximiliano Romero, tribuno de cuentas de Villa María, elaboró un informe anual de su gestión y denunció supuestas irregularidades, como pagos por encima del mercado y discrepancias de 2.900 millones en los balances municipales.
- Ante la falta de respuestas, recordó que recurrió a la justicia para acceder a la documentación requerida.
En su primer año de gestión como tribuno de cuentas en Villa María, Maximiliano Romero presentó un informe detallado señalando supuestas irregularidades en el manejo de los recursos públicos por parte del municipio.
La falta de transparencia, el “incumplimiento normativo” y la “opacidad en la administración” fueron algunos de los aspectos marcados en su análisis, basado en más de 1.000 informes sobre órdenes de pago y procesos administrativos, según indicó.
Principales irregularidades
Entre las inconsistencias reportadas se incluyen:
- Pagos por encima de los valores de mercado, incumpliendo el artículo 75 de la Carta Orgánica Municipal (COM).
- Contrataciones con proveedores que no justificaron su capacidad económica, técnica o financiera.
- Ausencia de licitaciones públicas, a pesar de ser el mecanismo principal para asegurar mejores condiciones de precio y calidad.
- Falta de remitos que acrediten la entrega de mercadería y errores en asignaciones presupuestarias.
- Incumplimiento de la Ordenanza de Compras (6404) y falta de rendiciones por parte de organismos municipales como el Ente de Turismo y Deporte y la Terminal de Ómnibus.
Además, Romero señaló que el municipio presentó un balance patrimonial provisorio en lugar del correspondiente, detectándose una discrepancia de 2.900 millones de pesos en el saldo de caja y bancos, así como cuentas inexistentes.
Judicialización y falta de respuesta
Debido a la negativa del municipio a proporcionar la documentación solicitada, Romero recurrió a la justicia, obteniendo fallos favorables que obligaban al gobierno local a entregar la información.
Sin embargo, la gestión municipal apeló dichas resoluciones, prolongando la falta de acceso a datos clave.
Romero expresó su preocupación por las prácticas de la gestión municipal, a la que acusó de priorizar la opacidad sobre la rendición de cuentas.
“El municipio no solo incumple con la Carta Orgánica, sino que demuestra un claro desprecio por el derecho ciudadano a conocer cómo se administran sus fondos. Seguiremos trabajando por una administración pública transparente y responsable”, afirmó.
El informe concluye que estas irregularidades no son errores aislados, sino un patrón de conducta que socava la confianza pública y dificulta el progreso de la ciudad.
