Este fin de semana se disputó en Villa María la Copa Argentina de Powerchair con equipos de distintos puntos del país. Y los locales, Botines de Acero, se consagraron campeones.
Entre el 9 y 10 de diciembre se llevó a cabo en el nuevo Salón de los Deportes el evento a nivel nacional.
Del torneo participaron por primera vez los “Botines de Acero”, equipo del programa Powerchair que impulsa el Ente Deporte y Turismo de Villa María. Y fueron quienes se consagraron ganadores por penales de la Liga Desarrollo.
En diálogo con Villa María VIVO su entrenador, Nicolás Bizarri, comentó: “El equipo estaba muy nervioso, pero siguieron a la perfección lo planeado, fueron inteligentes para contrarrestar la diferencia que tenía el equipo cordobés en relación al nuestro.
Al finalizar, la alegría abundaba en los rostros de los jugadores y familiares.
En mi caso, una emoción y descargo muy grande.
Si bien no esperaba este resultado (antes de empezar la copa) a medida que pasaban los partidos me di cuenta que estábamos para pelear el triunfo. Confié en los chicos y traté de mantenerlos lo más tranquilo posible.
En los penales pudo ser para cualquiera, pero cayó para nuestro lado y todo fue festejo”.
Y en sus redes expresaron: “10/12 día inolvidable para nuestro equipo de powerchair football que, hace un año atrás, recién nos conocíamos las caras.
Este triunfo es dedicado a todas las familias y jugadores de nuestro equipo que nos acompañaron durante todo el año y, especialmente, durante los días de competencia”.
La Copa Argentina de Powerchair en casa
El evento contó con la presentación de Tigres de Pacheco, últimos campeones de la Copa Libertadores y Copa Sudamericana.
Y también compitieron los equipos de Guerreros del Oeste (Chivilcoy), Gigantes sobre Ruedas (Neuquén), Power Chair (La Pampa), Titanes (Córdoba) y Rengos a Motor (Mar del Plata).
Mientras que respecto al Powerchair Football (futbol en silla de ruedas motorizada) es una práctica deportiva que está diseñada para personas con discapacidades motrices.
Los partidos se desarrollan 4 contra 4, en una cancha con las mismas dimensiones de una cancha de básquet y se divide en dos tiempos de 20 minutos cada uno.