Una de las principales máximas del Martín Fierro terminó, una vez más, siendo verdad. “Si entre hermanos se pelean…”, comienza una de las frases más célebres escritas por el autor de la obra gaucha, José Hernández.
Estos hermanos se pelearon, y a uno lo devoró la muerte, y al otro lo devorarán los años de su vida que deberá pasar dentro de la cárcel.
La Cámara del Crimen de Villa María condenó este miércoles 15 de septiembre a Gastón Ezequiel Lesana (30) a 15 años de prisión por el crimen de homicidio simple.
La víctima de este asesinato fue su hermano, Federico Adrián Acosta (42), quien la tarde del miércoles 25 de septiembre de 2019 murió producto de las heridas que le habría provocado Lesana en medio de una discusión entre hermanos que terminó de la peor manera.
Desde esa fecha, Lesana permanece detenido. Llegó a juicio acusado de ser el presunto autor de homicidio calificado por alevosía, pero luego la condena fue por homicidio simple. De otro manera, la pena hubiera sido mucho mayor a los 15 años recibidos.
¿Qué pasó entre los hermanos?
Lesana en su momento argumentó que Acosta tenía un arma de fuego y, por este motivo, se defendió de un posible ataque.
La autopsia y la reconstrucción de los hechos indican que Acosta fue apuñalado por detrás mientras se iba de su casa en barrio Las Playas.
Previamente, también se supo, habían mantenido una discusión.
El homicidio ocurrió en la vivienda de calle Puerto Rico al 3400, que sería parte de la discusión.
Según se pudo conocer, Lesana estaba en ese momento de regreso en la ciudad desde hacía pocos días. Mientras que Acosta vivía en la casa de su madre, fallecida años atrás.
Cuando Lesana se entregó, le secuestraron una cuchilla y una pistola 9 milímetros marca Bersa Thunder.
Acosta falleció en el Hospital Pasteur, donde ingresó con múltiples heridas de puñaladas.
La sangrienta escena ocurrió en barrio Las Playas. Según dijo el fiscal que investigó el caso, René Bosio, la víctima habría sido herida en la calle y se trasladó agonizando hacia la casa de una vecina que fue quien avisó a Bomberos.
Mientras, Lezama regresó a su casa de calle Puerto Rico al 1418, se cambió la ropa, cerró con llave la puerta de su vivienda, fue al domicilio de un familiar y se tomó un remis hacia la comisaría de calle General Paz.
Las primeras sospechas
“Hay cosas que no nos cierran de lo que contó el imputado. No es común que una persona en estado nervioso, con emoción violenta, accione de esa manera”, agregó en su momento Bosio en busca determinar el móvil del homicidio.
El origen de la discusión habría sido una disputa por elementos materiales que se reclamaron en un encuentro que fue subiendo de tono y terminó fatalmente.
Lesana asegura que actuó en defensa propia, pero para la Justicia hubo en el hecho otros elementos que dieron prueba de que fue un ataque en un momento en el que Acosta no representaba una amenaza para la vida de su hermano, ahora condenado a 15 años de prisión.
El juicio se realizó con jurados populares en la Cámara del Crimen de Villa María.
La abogada del acusado fue la asesora letrada de Tribunales, Silvina Muñoz, y quien llevó adelante la acusación fue el fiscal Francisco Márquez.
El tribunal técnico estuvo integrado por Edith Lezama de Pereyra, Eve Flores de Aiuto y Féliz Martínez.