En julio de este año, una familia de Oliva sufrió un trágico accidente con la explosión de la vivienda. Por el hecho, además de la pérdida total del inmueble, sufrieron lesiones gravísimas y un pequeño falleció.
La solidaridad se activó rápidamente: comenzó una colecta encabezada por la Fundación Un Tatuaje por una Sonrisa.
A esa tarea, personificada principalmente por Juan Pablo Rodríguez, se sumaron aportes del municipio que comprometió la construcción de una vivienda.
En la colecta se lograron reunir $5.000.000, y Rodríguez fue en las últimas horas para concretar la compra del terreno.
Aparecieron “los ángeles de Oliva”
Para su sorpresa, cuando fueron a visitar el loteo con la familia se encontraron con que los dueños del terreno se lo regalaron.
“Javier y Jime, los “ángeles de Oliva donaron el lote a la familia de Ámbar”, contó Rodríguez.
Respecto a la utilización del dinero que lograron reunir, indicó que será para mejorar y aportar a lo que el intendente de Oliva pueda sumar desde la Municipalidad.
También podrían utilizarse para comprar muebles “o lo que sea que necesite la familia”, dijo Rodríguez a El Diario de Oliva.
“Vamos a pegar los pedacitos”
“Fuimos a darle forma a la vida de esta hermosa familia, que hoy está totalmente destruida pero de a poquito y con ayuda de toda esta gente y de Dios van a ver que vamos a pegar todos esos pedacitos rotos”, dijo.
Agregó que van a lograr “empezar de nuevo”. “Nada será igual, pero hay que seguir”, dijo.
Explosión y dolor
El trágico hecho ocurrió en la tarde del viernes 21 de julio en un domicilio de calle Santiago Beanne y Mitre.
Allí habría explotado un termotanque que produjo luego el derrumbe de la vivienda.
En el lugar estaba la dueña del inmueble junto a sus tres hijos.
Los cuatro fueron trasladados hacia Córdoba Capital en grave estado, y uno de ellos, un niño de 7 años, falleció a causa de las lesiones.
Pese al dolor, se activó una red de contención y solidaridad que permiten que hoy la familia pueda comenzar a rearmar su vida.