Juan Carlos Sosa y Hugo Amaya fueron encontrados sin vida el 5 de abril y 7 de mayo del año pasado, respectivamente, y sus muertes conmocionaron a la ciudad por la naturaleza de los hechos.
El primer caso, de Sosa, ocurrió en inmediaciones del Molino Fénix. Fue su mujer la que lo halló sin vida y brutalmente golpeado.
En tanto Amaya, el caso comenzó siendo caratulado como muerte de etiología dudosa ya que el cuerpo se encontraba solo en su domicilio, que estaba cerrado y aparentemente sin aberturas violentadas.
Luego de las investigaciones, las fiscalías determinaron que se trató de casos de homicidio y hay hasta el momento tres imputados que están actualmente con prisión preventiva: dos por Sosa y uno por Amaya.
Un repaso por los puntos principales de cada hecho que esperan en sala para ir a juicio, en un contexto en donde la pandemia por el Covid-19 demoró el accionar de la justicia:
Brutalmente golpeado en el Molino
Juan Carlos “Piñón” Sosa, de 64 años, salió de su hogar el mediodía del viernes 5. Iba al quiosco a comprar y volvía a su casa.
Eso pensaba su mujer que, atenta a que el regreso de su marido se demoraba cada vez más decidió ir a buscarlo.
El cuerpo del hombre, brutalmente golpeado y sin vida fue lo que encontró.
El hallazgo fue en la zona del Molino Fénix, en inmediaciones del domicilio de la pareja.
Por la jubilación
Luego de la presencia policial y de la fiscalía de segundo turno, a cargo de Juliana Companys, comenzó la investigación del hecho. A horas del hallazgo, la Policía había demorado a cuatro personas por el hecho.
Finalmente la fiscalía imputó a dos: una pareja que vivía en un hotel céntrico y que hoy, a un año del hecho, están con prisión preventiva.
Se trata de Laura Gonzalez, de 38 años y Lucas Salto, de 25. El dato: la mujer conocía a Sosa.
Según las investigaciones que realiza Companys, se trataría de un homicidio simple y que podría haber sido por un motivo económico.
Sosa había cobrado su jubilación recientemente, lo que hace presumir que, ante el conocimiento de ello, la pareja habría querido robarle.
Juan Carlos Sosa fue encontrado sin vida, golpeado brutalmente con ladrillos y palos.
El caso sería elevado a juicio en las próximas semanas.
TODO SOBRE EL CASO ► HOMICIDIO DE JUAN CARLOS SOSA
Asesinado por su inquilino
El otro caso fue extraño desde un inicio: Hugo Amaya, de 81 años, fue encontrado sin vida en su domicilio de calle San Juan el 7 de mayo.
El hombre estaba dentro de la vivienda, cerrada y aparentemente sin signos de que las aberturas hayan sido violentadas.
Eso implicó que el caso se tratara desde un inicio como muerte de etiología dudosa. Fue una vecina la que, al ver que Amaya no respondía a su llamado, dio aviso a los Bomberos que violentaron la puerta para ingresar, encontrando al hombre tirado con algunos golpes.
Se estimaba, podrían haber sido producto de una caída.
Fue asesinato
Luego de analizar 350 horas fílmicas de cámaras de seguridad ubicadas en inmediaciones del domicilio de Amaya, la Policía de Córdoba descubrió al supuesto autor de su muerte.
El trabajo ordenado por la fiscalía a cargo de Silvia Maldonado pudo dar con el supuesto autor y ordenó su detención al día siguiente del hecho.
El acusado es Franco Andres Narvaja, de 43 años y quien residía en una de las habitaciones que Amaya rentaba en su casa. Se lo encuentra como supuesto autor de los golpes de Amaya que fueron fatales, principalmente uno producido en el cráneo del adulto.
El hombre está imputado por homicidio simple y hoy está en prisión preventiva. El caso ya fue elevado a juicio.
TODO SOBRE EL CASO ► HOMICIDIO DE HUGO AMAYA
Foto: Portada Caso Sosa