La jefa de la brigada de la Fuerza Policial Antinarcotráfico de Villa María fue indagada por el fiscal del caso en el que fue detenida e imputada por ser parte, aparentemente, de una organización que vendía drogas.
Si bien no trascendieron detalles de lo que fue el acto de la indagatoria, no habrían surgido elementos que provocaran un cambio importante en la causa.
La investigación es conducida por el fiscal de Lucha contra el Narcotráfico de Villa María, Walter Gesino.
Este martes le tomó declaración indagatoria a Jéssica Peña, oficial de la FPA, y a su pareja Luciano Araujo, también efectivo policial, pero que prestaba funciones en Bell Ville.
Quien está asesorando desde el punto vista legal a ambos imputados es el abogado Eduardo Rodríguez.
Para este miércoles está previsto que se le tome declaración indagatoria al tercer implicado en el caso, un hombre mayor de edad, que no es policía.
Este caso se desató a partir de allanamientos que se hicieron en dos domicilios de Villa María: uno en barrio Lamadrid y otro en barrio Parque Norte.
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Se secuestraron plantas de marihuana y elementos que dieron cuenta de la existencia de un laboratorio para el procesamiento de drogas.
Las tres detenciones se dieron en diferentes momentos, siendo la jefa policial la última en ser capturada.
La mujer no tendría una participación protagónica en la supuesta organización delictiva, pero por se encontraría más comprometida por su función policial.
