La Escuela Villamariense de Natación tuvo que cerrar sus instalaciones durante jueves y viernes. Es para realizar costosas reparaciones tras el último robo que sufieron días atrás.
El pasado domingo 8 de agosto el natatorio ubicado en calle Salta donde funciona la Escuela Villamariense de Natación sufrió un nuevo robo.
Se trató del séptimo durante los diez desde que se instaló y se llevaron cables trifásicos que son para el sistema de calefacción.
Al arrancarlos, dañaron completamente toda la instalación de climatización y por ello este jueves 18 y viernes 19 de agosto cerraron al público para repararlo.
En diálogo con Villa María VIVO, Jorge Costa, propietario de la pileta de la Escuela Villamariense de Natación, contó la situación.
“Nuestra pileta tuvo que cerrar como consecuencia de ese robo. Porque para llevarse esos cables cortaron con fuego, quemaron la parte plástica para generar un cortocircuito y arrancarlos, sin el peligro de la luz.
Pero a la vez ese corto quemó los sistemas eléctricos del caloventor que genera aire caliente y una caldera”.
Explicó que las pérdidas son muy costosas: “Estamos trabajando, tuvimos que poner mucho dinero en repuestos e incluso tuvimos que comprar una caldera. Que con suerte nos van a colocar el lunes próximo.
Así que esperamos volver a abrir lo más pronto posible”.
Por último, respecto a los autores del robo aclaró que todavía no fueron identificados ni hubo mayores avances en la investigación.