Desde hace años en los laboratorios del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas de la UNVM vienen desarrollándose líneas de investigación que buscan posibilitar mejoras para el sector agro productivo e industrial de la región.
En ese sentido, a partir de diversas fuentes de financiamiento, los grupos de trabajo se han ido consolidando con la incorporación de personal sumamente calificado y de equipamiento que permiten ofrecer diversos servicios a terceros.
Tal es así que en esta oportunidad desde el Instituto Multidisciplinario de Investigación y Transferencia Agroalimentaria y Biotecnológica (IMITAB) recientemente estuvieron llevando a cabo un análisis en las instalaciones de la planta láctea de Santa Clara para determinar tiempos de residencia en intercambiadores de calor y tubos de retención de sistemas continuos de pasteurización.
Según comentaron desde el grupo de Análisis y Simulación del Procesamiento de Alimentos (ASIPAL), la técnica utilizada fue la de estímulo-respuesta, permitiendo relevar la distribución de los tiempos de resistencia y del tiempo mínimo de retención.
“Se trata de parámetros fundamentales que permiten asegurar la inocuidad microbiológica de los productos que son tratados térmicamente en este tipo de sistemas”, comentó al respecto el director e investigador que forma parte del organismo de doble dependencia entre el Conicet y la UNVM, Alejandro Lespinard.
Además, desde el equipo informaron que también llevaron a cabo la validación del proceso de pasteurización de grasa anhidra deshidratada (AMF), con el objetivo de mejorar tratamientos térmicos.
Según destacaron, estas instancias son posibles gracias a que disponen de equipamiento de última generación como lo es, por ejemplo, una cámara termográfica que permite el análisis de procesos de pasteurización, esterilización, secado, cocción y refrigeración entre otros.
Además de este servicio el Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas también cuenta con otros equipos de investigación que avanzan en el asesoramiento en materia ambiental, energética, de desarrollo urbanístico y un laboratorio de análisis clínicos veterinarios sumamente equipado en la sede de Villa del Rosario donde realizan controles de brucelosis, triquinosis, anemia equina, entre otros.