La víctima del crimen en el barrio San Martín, Máximo Uriel Ojeda, era un joven santafesino que hacía unos meses se había venido a vivir a Villa María.
El joven, de 20 años de edad, fue asesinado de un disparo en el pecho en la noche del jueves 1º de septiembre, en una vivienda de calle Azcuénaga 253.
En un baldío junto a la casa donde fue el crimen se encontró el arma homicida, un revolver calibre 32, con tres cartuchos percutados y uno ejecutado.
De acuerdo a lo que pudo saberse sobre la víctima, Máximo Uriel Ojeda, se trata de un joven de 20 años de edad, oriundo de la provincia de Santa Fe.
Según fuentes de la investigación, es joven santafesino se había radicado hacía varios meses en Villa María.
En cuanto a su presencia en esta casa de calle Azcuénaba 253, se dijo que desde hacía dos meses era su lugar de pernoctancia.
El arma y las versiones del hecho en torno a la víctima del crimen
Aparentemente, dentro de la casa, al momento del disparo mortal, había varios jóvenes, entre los que se encontraba Ojeda.
Una versión que surgió en el barrio, pero que no fue confirmada oficialmente, es que este grupo de personas habría estado manipulando el arma cuando se produjo el disparo.
Dentro del revolver calibre 32 encontrado en un baldío cercano, había tres cartuchos percutados, pero que no salieron.
Este dato alimentaría la versión de que alguien podría haber gatillado el arma varias veces, pero los disparos no se concretaron.
El cuarto cartucho es el que estaba disparado, y que sería el que dio contra el pecho de Ojeda, causándole la muerte.
Todo esto, por ahora, son versiones.
Encontraron droga en la casa del crimen
En el marco de la investigación por este crimen en barrio San Martín, también se econtró droga.
Dentro de la vivienda de Azcuénaga 253, los investigadores hallaron una bolsa plástica con un contenido que sería estupefacientes.
Por eso se dio participación a la Fuerza Policial Antinarcotráfico.
El arma que se considera la homicida fue encontrada en un baldío cercano a la vivienda donde habría ocurrido el crimen.
Pero dentro de la casa había más balas: en total se decomisaron 23 cartuchos correspondiente al mismo calibre 32 del revolver incautado.
El arma será enviada a Córdoba para su peritaje.