En la noche del lunes 4, los integrantes de la Patrulla Rural Sur tuvieron que arremangarse sus uniformes y hace todo a su alcance por salvar una nueva vida que había llegado al mundo.
Eran cerca de las 21:00 horas cuando el llanto de una niña irrumpió en un campo cerca de Ticino.
Un móvil que se encontraba patrullando en las proximidades acució a un llamado telefónico que pedía ayuda.
El dueño de un campo solicitaba con urgencia personal médico debido a que la pareja de uno de sus empleados estaba en trabajo de parto. La mujer se llama Marina Pereyra, tiene 29 años y su pareja 32.
El personal policial estaba cerca y pudo llegar en breve para asistir con las medidas de seguridad e higiene del caso a un nacimiento que ya se había efectuado.
Madre e hija fueron trasladadas en la unidad móvil policial hacia el dispensario local, contando con la colaboración del personal del Destacamento Ticino para la realización de un cordón sanitario.
La Policía informó que ambas se encuentran en perfecto estado de salud, y fueron derivadas al Hospital Pasteur de Villa María para su mejor atención.
La niña, llamada Donna Luz, ingresó con un peso de 3,7 kilos.
Foto: Policía de Córdoba.