Sergio tiene Espondilitis Anquilosante, una enfermedad crónica autoinmune, su cuadro se agravó en los últimos meses y desde la obra social OSFATUN, no le envían el medicamento que necesita para vivir.
El hombre es un vecino de la ciudad que requiere un medicamento de la gama “biológica”, que se producen con células animales y su precio es costoso.
Cada dos meses, debe aplicarse las dosis para poder seguir adelante con su vida. La medicación era otorgada por la obra social Osfatun, pero una situación ocurrida en 2023 adelantó el cambio de droga y aparecieron los problemas.
Sergio, durante 15 años, se trató con Remicade, un medicamento que le permitió continuar sus días sin inconvenientes de gravedad.
Hace 7 años que cuenta con la cobertura de la obra social y el problema mayor que atravesó fue la demora en la entrega, pero la misma se realizaba.
Cambio de medicamento y falta de respuesta
Después de un período de colocación, comenzó a bajar el nivel de efecto ante la asimilación del cuerpo, lo que sumado a diferentes situaciones que atravesó, el cuadro de Sergio se agravó y requirió un cambio de medicamento.
Los doctores determinaron que era el momento de cambiar y se hizo el pedido que derivó en el problema: la falta de respuesta de la obra social, comentó.
Según detalló, el 26 de diciembre envió la solicitud con todos los requerimientos y con un pedido de urgencia por parte de la doctora que lo atiende.
“Vengo sin la otra medicación desde hace dos meses, la enfermedad hizo crisis y la doctora dijo que lo necesitaba por urgencia”, narró.
Sergio explicó que desde entonces, la única respuesta que obtuvo es que el trámite “está un auditoría”.
Espera y daño
Mientras tanto, para paliar la situación, los médicos le suministran antiinflamatorios y corticoides, pero esto puede suponer un grave daño a sus riñones y en el hígado, según dijeron los médicos.
“Ese es el apuro”, dice Sergio, que ya envió carta documento a la obra social y que en los próximos días iniciaría un recurso de amparo con su abogado.
“Estoy cursando una enfermedad invalidante y cada día que pasa, mi calidad de vida se va deteriorando”, dijo en una petición de firmas online para que vecinos y vecinas lo acompañen.
Para firmar, podes ingresar en este enlace.
