[FOTOS] Unos 30 pasajeros de la empresa Córdoba-Coata sufrieron un más que acalorado viaje en un servicio que partió en horas de la siesta de este viernes 4 de marzo desde Villa María con rumbo hacia Chazón por ruta provincial 4.
Los boletos comprados en la Terminal de Ómnibus de Villa María indicaban que el servicio del coche 3346 era “con aire acondicionado”. A las 15:45, hora de partida del colectivo, en la ciudad hacía casi 30 grados de temperatura.
Cuando el coche comenzó a andar, los pasajeros sintieron que la temperatura en el interior no era la más agradable. Algunos empezaron a sofocarse y se abanicaban con papeles o lo que pudieran.
Ante una consulta al chofer sobre la situación, este les dijo que el aire acondicionado no funcionaba y tampoco se podían abrir las ventanillas.
El calor adentro del micro aumentaba y algunas personas empezaron a sentirse mal. La mayoría del pasaje estaba formado por estudiantes, varios de ellos muy chicos, casi niños.
En la búsqueda de un poco de aire, algunos de los pasajeros de la unidad de doble piso se sentaron en la escalera que va hacia la cabina del chofer, ya que era el único lugar con ventilación. La ventanilla de la cabina es la única que se abre.
Esto hizo que niños y mujeres viajaran varios kilómetros sentados en un lugar que no es apropiado ni en condiciones de seguridad.
El Ersep constató en lo que va de 2016 numerosas infracciones a micros de pasajeros por faltas en medidas de seguridad. Esta situación ocurrida en un coche de la empresa Córdoba-Coata suma una falencia más al transporte interubano de la provincia.
