Según un relevamiento de precios que hizo la Unión Cívica Radical (UCR), la Municipalidad de Villa María pagó tres veces más del costo de mercado por reductores de velocidad.
El informe se refiere concretamente a los reducctores llamados también atenuadores o “despertadores”.
“Aparecen en las esquinas, duran apenas unos meses y son de dudosa eficacia, salvo, que el objetivo buscado sea la irritación de los conductores”, sostienen radicales en un comunicado.
Los costos
De acuerdo a los números difundidos por el partido, “en enero de este año se gastó en estos materiales cerca de 900 mil pesos, con un dólar para esa fecha de $ 18”.
Por el ítem “Reductor de velocidad despertadores PVC”, el Municipio de Villa María pagó es mes $ 1.229,90 el metro.
Aseguran desde la UCR que realizaron consultas a otros municipios para conocer el costo de estos materiales.
El mismo material, hasta la semana pasada (con el dolar a $ 28) se conseguía a $ 439 pesos el metro.
Además, por tacha vial plana el municipio pagó $ 312, siendo su valor de $ 123 “y así con el resto de materiales”, agrega el informe.
Empresas bajo sospecha
Además de la sospecha por supuestos sobreprecios, la UCR pone foco en las empresas proveedores.
Aseguran que la empresa beneficiada por esta compra “se dedica a vender insumos para seguridad industrial, por lo menos, así se presenta en su página de internet, que es bastante completa, y no promociona estos elementos”.
Además, para la colocación, afirman que “se contrató para realizar las tareas a una monotributista, cuya actividad principal es de servicios de restaurant y cantina, que según consta en la AFIP, no tiene empleados”.
En este caso se pagó $ 450 pesos, según señala el informe.
Política cuestionada
La UCR cuestionó así lo que considera es una política errónea en el manejo de los fondos públicos, entendiendo que se están pagando costos muy por encima de lo que ofrece el mercado.
También cuestionan las empresas contratadas, por considerar que, en principio, no son específicamente dedicadas a los rubros relacionados.
Además consideran que el personal del corralón podría hacer la tarea de colocación de los reductores, por contar con el material y la capacitación necesaria.
Planteos de irregularidades
“Hace tiempo que se viene planteando las irregularidades en el área de compras y contrataciones, cosas como las que aquí se mencionan no sorprenden; pero si preocupan”, sostiene la oposición.
Comparan que “solo en enero se gastó o mal gasto en esto, el equivalente a 2 viviendas sociales o el dinero necesario para que los chicos del barrio de Las Playas hubiesen podido empezar las clases normalmente y no tener que perder varios meses, porque su escuela no estaba en condiciones edilicias”.
Foto: Archivo.
