“La curva está totalmente chata. No hay virus en circulación”, fueron las dos primeras afirmaciones que realizó Sergio Arroyo, director del Hospital Pasteur y titular del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) regional ante la consulta de Villa María VIVO, a dos meses de la aparición del primer caso sospechoso de Covid-19 en el departamento San Martín.
Con la certeza de que los 24 positivos detectados hasta ahora fueron de origen importado, la situación parece estar controlada. Sin embargo, la guardia se mantiene en alto y a la espera de posibles nuevos casos, debido a la presencia del virus dentro de la provincia.
TODO LO PUBLICADO ► CORONAVIRUS
En el conglomerado de Villa María-Villa Nueva, más las localidades cercanas, se llegaron a realizar 410 hisopados en estos dos meses, y el 93,17% dio negativo, es decir que 382 casos fueron descartados luego de ser tomados como sospechosos.
De los 24 contabilizados como positivos en el departamento San Martín, 20 ya obtuvieron el alta virológica y 11 el alta definitiva, al momento de esta publicación.
El último caso positivo confirmado hasta ahora fue del 15 de abril, hace exactamente un mes.
Varios de estos factores permitieron, en los últimos días y de forma importante, flexibilizar la cuarentena en Villa María y Villa Nueva, “pero por más que no se hayan registrado casos nuevos, siguen siendo zona roja por conglomerado”, advirtió el profesional.
Resultados alentadores
Sin dejar de lado las precauciones que hay que tener, Arroyo consideró que “el resultado hasta ahora fue excelente” en cuanto a las medidas adoptada. “Hay que ver ahora qué pasa ante un mayor número de gente circulante”, observó.
En cuanto a lo sanitario, aseguró que en el primer y segundo nivel de atención “hay contención” asegurada con toda la infraestructura que el sistema cuenta. “Lo que estamos evaluado es el tercer nivel, por el surgimiento de posibles casos que pudieran requerir más respiradores”, apuntó.
La situación de aparente control en la zona de Villa María puede llevar a un relajamiento excesivo, con consecuencias no deseadas.
Sigue entre nosotros
“El virus está circulando en Córdoba y no se puede frenar”, aseveró Arroyo, en otro tramo de la entrevista.
“Esperemos que cuando llegue a nuestra zona la curva de casos sea lo más chata posible”, ponderó.
“Mientras tanto hay que mantenerse en aislamiento, y las salidas tienen que ser las mínimas posible para que (el virus) no empiece a transmitirse de persona a persona”, aconsejó.
Esto lo dijo porque “la circulación de gente de manera importante está en proporción directa a que haya posibilidad de casos nuevos”.
La salida de la cuarentena
La cuarentena y el aislamiento social fueron las herramientas más importantes para prevenir la expansión del virus.
En Villa María y la región se logró que no hubiera personas contagiadas más allá de los casos que contrajeron la enfermedad fuera del país.
Con la apertura de más comercios y el reinicio de varias actividades, se permitió también que más personas comiencen a circular por las calles, cruzarse a pocos metros, y exponerse a posibles contagios.
Por eso se mantiene la obligatoriedad del uso del barbijo no quirúrgico o tapaboca, el distanciamientos social, y el lavado de manos como principal medida sanitaria.