A poco más de un mes del juicio por el crimen de Alexander Nano Martínez, continúa el apoyo para que el Tribunal Superior de Justicia revise el fallo.
El juicio por el crimen de Nano Martínez sumó un sabor amargo a su familia y a ciudadanos que se mostraron en contra del fallo.
Tras una semana de audiencias por las que pasaron policías, bomberos, abogados y allegados a Nano, entre otros testigos, se decidió absolver a Tomás Cánova e imponer 18 años para Joaquín Munarriz.
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Esto fue lo que causó indignación pública y principalmente a la familia de Nano, quienes junto a su abogado, Manuel Argüello, solicitaron al Tribunal Superior de Justicia de Córdoba que revise el fallo.
Es en este contexto que se expidió la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, con un duro documento contra la justicia en el reflejan el acompañamiento a la familia del joven asesinado.
Cabe destacar que Omar Toscano, referente de la Asamblea a nivel local, estuvo presente durante el juicio junto a allegados a Nano.
APDH pide que se revise el fallo
“Durante el debate se cuestionó, en innumerables ocasiones y en una misma línea, la conducta de Alexander, quien no se puede defender”, dice en una parte el comunicado.
Agregan que en el fallo “se hizo una valoración incompleta y parcial de las pruebas”.
En el documento, que publicó El Diario, dicen que “La injusticia y desporporción de fuerza se puso de manifiesto desde el primer instante”.
“La justicia no miró con objetividad e imparcialidad y la espada no cayó con severidad sobre los acusados”, sostienen.
Así, dicen que no fue “garante de la igualdad y de los Derechos Humanos, y aquí,el más importante, el Derecho a la Vida”.
En el escrito, hablan de que en la balanza de la justicia villamariense “no pesaron las pruebas contundentes e irrefutables en contra de los acusados”.
“Nos preguntamos si este tribunal ha tomado esta decisión desde una perspectiva clasista ante la vunerabilidad y desventaje de Alexander y de su familia”, agregan.
Cabe recordar que el abogado de la familia de Nano hablaba de que en Cánova y Munarriz había “porofobia” o el “odio a los pobres”.
Finalmente, afirman el acompamiento al pedido de la querella para que el TSJ de Córdoba “revise el fallo por el crimen de Alexander Martínez”.
