Marcos Juárez vive en Villa María, es profesor de educación física y en un encuentro de circo se “enamoró de la nariz roja”. Hace 14 años creó al Payaso Pururú y transmitió la profesión a su pequeño hijo el “mini puru”.
Hoy es el Día Internacional del Payaso en honor al nacimiento de Emilio Alberto Aragón, el payaso “Miliki”. “El Payaso Pururú nació en Monte Maíz. Arranqué haciendo juegos hasta que fui a un encuentro de circo y ahí me enamoré de la nariz roja”, contó su creador a Villa María VIVO.
“Quería tener mi propio número y empecé a hacer espectáculos callejeros. Ahí arranco mi hermosa profesión, creando, inventando, buscando información y adaptando mi personaje”, relató.
El amor que recibe
Para Marcos, el amor que recibe lo motiva día a día para continuar con su profesión. Así, dijo: “me llena el alma. El solo hecho de ponerte una nariz roja te llena el alma. Sentis otra cosa. Sentis que estas volando, es algo maravilloso”.
La construcción del personaje del payaso se trabaja con los años y en cada espectáculo: “uno lo va a desarrollando al personaje. La construcción del personaje lleva muchísimo tiempo, hasta el día de hoy. Cambié el vestuario y el maquillaje muchísimas veces. Antes usaba una peluca”.
Su hijo: un mini payaso
Desde pequeño, su hijo Felipe lo veía vestirse y prepararse para convertirse en el Payaso Pururú. A comienzos de este año, Felipe empezó a disfrazarse y ofrecer espectáculos a la familia.
“Cuándo se vino la pandemia y nos encerramos, empezamos a hacer vivos y el empezó a cambiarse todos los días. Me llena el alma que le guste la profesión”, contó. Junto con su padre, Felipe baila, hace piruetas al mejor estilo de un payaso y se convirtió en el “mini puru”.
Desde el inicio de la pandemia, hicieron 50 vivos con espectáculos para chicos y grandes. “Fue hermoso, pero después te das cuenta que necesitas el contacto con la gente, el abrazo, la risa. Extrañas muchísimo hacer el espectáculo callejero, ponerte el traje, preparar el sonido, que la gente se acerque”, dijo.
Ante la posible apertura de temporada de verano en Carlos Paz, Pururú contó que irá para realizar sus espectáculos y comprobar “si rinde. Si la gente va y la pasa bien. Será muy triste ver a las personas a través de un barbijo”.