Durante La madrugada la Policía desactivó dos fiestas clandestinas.
La primera de ellas se estaba desarrollando en barrio Felipe Botta.
Como consecuencia de esta situación se identifica como el propietario del lugar a un hombre de 53 años de edad que fue notificado por sobrepasar el decreto presidencial.
Finalmente, se dio aviso a la fiscalía de Tercer Turno, a cargo de René Bosio.
La segunda fue en barrio Centro
Luego personal policial se hace presente en una vivienda donde había otra fiesta clandestina.
En este caso la propietaria era una mujer de 24 años de edad.
Al llegar la Policía, las personas que estaban dentro del inmueble comienzan a circular y a dejar el lugar.
Además, se tuvo que solicitar la presencia de Bomberos Voluntarios ya que a una mujer de 22 años que se encontraba en la casa comenzó a presentar síntomas de ataque de pánico.
Debido a esta situación fue trasladada al Hospital Regional Pasteur.
Fiestas clandestinas: Una situación que no tiene solución
El fin de semana del 29 de marzo, hubo 9 fiestas clandestinas.
Las reuniones multitudinarias en lugares informales y en condiciones sin ningún tipo de cuidado son ya algo habitual en la noche de la ciudad y la región también.
La Policía había informado sobre las primeras tres que se desactivaron en el inicio del fin de semana.
Pero con el correr de las horas y de la noche, se incrementaron los operativos de desarticulación de estas reuniones no permitidas.
Las intervenciones fueron en el marco del contexto actual en el que se encuentran vigentes disposiciones que tienen por objeto contener los efectos de la pandemia por Covid-19.
La Departamental San Martín realizó la desactivación de reuniones sociales que se constataron fuera del marco mencionado.
En ese sentido se detectaron en el transcurso de los días sábado y domingo un total de nueve desactivaciones de “fiestas clandestinas”.
En conjunto, se estimó que estos encuentros había sumado aproximadamente la presencia de 715 personas.