Maria Eugenia Vidal dijo que confía en los cordobeses para ponerle un límite al kirchnerismo, respaldó a Darío Capitani en Villa María y aseguró que Juntos por el Cambio tiene la experiencia y la dimensión para gobernar el país, además de provincias y ciudades, a partir del 10 de diciembre de 2023.
La dirigente de Juntos por el Cambio (JPC) llegó a Villa María por segunda vez en el último año y brindó una conferencia de prensa en un café céntrico y luego mantuvo un encuentro con vecinos en el Teatrino del Parque de la Vida.
Estuvo acompañada de Darío Capitani, de quien dijo que representa “lo que queremos para el país, la honestidad, el compromiso, el amor por su ciudad. Estar acá acompañándolo es un orgullo”.
Vidal sostuvo que “en este ciclo del kirchnerismo que se está agotando, el cambio en serio debe ser en todo el país. No alcanza con un presidente o presidenta. Necesita estar en cada ciudad. Por eso es bueno que haya muchos dirigentes como Darío Capitani”.
Arribó luego de visitar La Pampa para apoyar al precandidato a gobernador del Pro, Martin Maquieyra.
“No me canso de escuchar a los argentinos y trabajar para tener el mejor plan posible a partir del 10 de diciembre, y que de verdad se termine este período de angustia, frustración, falta de futuro, que no podamos progresar. Que nos parezcamos más a Córdoba y su espíritu para salir adelante”, anheló la ex gobernadora de la provincia de Buenos Aires.
Este fue parte del diálogo con la prensa de Villa María este miércoles por la tarde:
-¿La idea del recorrido en la provincia es apoyar a candidatos para la gobernación de Córdoba?
-Tenemos muchos dirigentes valiosos. Todos tienen algo en común: caminan por los barrios, escuchan, como me gusta a mí. La política no tiene que ir solamente a las grandes capitales. Cada argentino importa. Vale lo mismo, viva en una ciudad grande o en un pueblo chico. Y no se trata de escuchar solamente, sino de ponerse en el lugar del otro, saber lo que le pasa. Me interesa ver al panadero, al kiosquero, al camionero para ver cómo está.
-Con tantos candidatos de JPC en Córdoba y en el país, ¿cómo debe resolverse? ¿Por interna, por acuerdo?
-Siempre hubo diálogo en JPC. Pero más allá de los acuerdos, están las Paso, que son un buen mecanismo para competir. La competencia es buena y bienvenida. Lo importante es que sea sana, con altura, con ideas y propuestas concretas. Y que los argentinos elijan. Y al día siguiente, los que pierdan tienen que acompañar a los que ganen, porque el adversario no está dentro de JPC. Está afuera. Tenemos que derrotar este ciclo de 20 años de kirchnerismo, de ausencia de oportunidades, falta de progreso, una política que no se ocupa de la agenda real de los argentinos. Peleamos contra la resignación, contra que los argentinos piensen que no hay más salida, para que no bajen los brazos.
-Dijo que no está en campaña. Entonces ¿cuál es el sentido de la escucha si no es para una campaña?
-Empecé a hacer política con Mauricio (Macri) a los 27 años, cuando él quería ser jefe de Gobierno. Fui a cada uno de los barrios del sur de la ciudad, uno por uno a los asentamientos, escuchando. Nunca más paré, sea campaña o no. Estoy haciendo lo que siempre hice. La mayor parte de los días de mi vida los empiezo en la calle. No se puede hacer política sin recorrer, ver, tocar, sin el mano a mano. No se puede representar una realidad que no se conoce. Y hay que tener un plan serio para salir adelante.
-¿Cuál es ese plan en Juntos por el Cambio?
-La prioridad es bajar la inflación, que no te deja vivir y no podes proyectar. El ahorro es una palabra de la que no hablamos en Argentina. La inflación no nos deja soñar. Necesitamos un plan económico que haga lo que hicieron nuestros hermanos latinoamericanos. Ninguno de los países de la región, excepto Venezuela, tiene esta inflación. Y hay gobiernos de derecha y de izquierda. No es una cuestión ideológica. Necesitamos un plan económico en serio, para volver a soñar que podemos progresar. Lo segundo es la educación. Si la mitad de los chicos no terminan el secundario en tiempo y forma, si los que están en primaria no aprenden a leer y escribir, si vemos que no aprenden, ¿qué sentido tiene todo lo que hacemos por educación? Si no aprenden, pasa lo que pasa hoy. Terminan el secundario y no tienen trabajo. Quiero volver a la Argentina en la que si terminabas el secundario, tenías trabajo y no eras pobre. Esa es la Argentina que quiero. Pensar en progresar y estar mejor que tus padres, y que tus hijos puedan estar mejor que vos. Es la Argentina que una vez vivimos y quiero recuperar. Para eso trabajamos.
-¿Qué cambió en JPC respecto a cuatro años atrás?
-Primero, somos mucho más grandes. Se sumaron sectores como los de Miguel Ángel Pichetto, López Murphy, Margarita Stolbizer, Facundo Manes, Carolina Lozada, Martín Tetaz. Hay mucha gente nueva, dirigentes que vienen de la sociedad civil, del sector privado para renovar la política. Es un JPC con experiencia de gobierno a nivel nacional, con gobiernos en más provincias e intendencias. Todo nos da capacidad y experiencia para enfrentar los problemas que vienen, que son difíciles y no resisten improvisaciones ni recetas mágicas. Aprendimos de los errores. Tenemos una coalición que va a cumplir 8 años y tiene convicciones muy profundas que ha sostenido en el tiempo. Nuestro trabajo en los últimos 3 años impidió que el kirchnerismo se llevara la república puesta. Hubo un JPC unido a pesar de la derrota de 2019 que se plantó y dijo “hasta acá”. Tenemos claro qué es lo más importante en transparencia, democracia, valores que sostuvimos estos años. Tenemos la experiencia de los límites que logramos ponerle al kirchnerismo. Y la primera que puso el freno fue Córdoba en 2015. Confío en que Córdoba va a ser ese lugar en esta elección que diga “acá no”. Y se plante. Confío mucho en los cordobeses.
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