César Darío Moreno, un villamariense de 50 años, falleció en el penitenciario de Bouwer en septiembre del 2023. Su nombre vuelve a ser noticia porque el fiscal José Mana ordenó allanamientos y la detención de 8 personas, incluído el exdirector de la cárcel, por el hecho que sería tortura seguida de muerte.
El miércoles 10, el fiscal de Instrucción del Distrito 1 Turno 3 de Córdoba, José Alberto Mana, ordenó una serie de procedimientos en el marco de la investigación por tortura y muerte.
Efectivos policiales allanaron domicilios y la cárcel, además de detener al ex director, seis guardias y un médico forense.
Puntualmente investigan la muerte de César Darío Moreno, un villamariense de 50 años que fue detenido el 14 de septiembre por un hecho de resistencia a la autoridad. Dos días después, murió en el penitenciario.
Moreno no registraba antecedentes penales y padecía transtorno de bipolaridad. Desde antes de su detención, se le habría quitado la medicación aparentemente ante la ausencia de hechos vinculados a la enfermedad, según indicó quien era su pareja a El Doce.
Sin embargo, antes de su detención sufrió un episodio en el que agredió a empleados de una panadería en Nueva Córdoba. El hecho quedó filmado y se viralizó por redes.
Tras la aprehensión, personal policial lo trasladó al penitenciario de Bouwer debido a la falta de lugar en la comisaría.
Una vez allí, habría mantenido una discusión con un guardiacárcel. La situación escaló y, según la investigación de la fiscalía, personal carcelario lo ató a una camilla, torturó, golpeó y no le brindó asistencia médica.
Esto habría ocurrido entre el 16 y 18 de septiembre, hasta que Moreno falleció producto de “los severos padecimientos sufridos”, indica la acusación.
Pruebas contra los detenidos
Las ocho personas pertenecientes al Servicio Penitenciario de Córdoba son el exdirector de la cárcel, seis guardias y un médico forense.
De acuerdo a lo que pudo saber La Voz, están imputado por presuntos autores del delito de tortura seguida de muerte. El delito prevé la pena máxima: prisión perpetua.
Desde el Ministerio Público Fiscal indicaron que en la investigación se reunió “importante caudal probatorio: filmaciones, evidencia documental, prueba testimonial, peritaje técnico que permiten sostener la existencia del hecho y la participación de los imputados”.
Además, se siguen lineamientos de instrumentos internacionales de referencia como los protocolos de Estambul y Minnesota para la investigación de hechos de torturas y muertes ilícitas en contextos de encierro.
“Una atrocidad”
Soledad, viuda de Moreno, habló con El Doce y sostuvo que lo que le hicieron al villamariense fue “una atrocidad”.
Explicó que el debía tomar medicación de por vida, pero que un psiquiatra en algún momento le hizo ver que no era necesaria y el la dejó. “El día del hecho que lo detienen estaba sin medicación”, indicó.
La mujer recordó que la familia estaba preocupada “pensando que podía andar en la calle, que le podía pasar algo. Cuando nos enteramos que estaba detenido tuve una tranquilidad, porque digo, va a estar bien cuidado”.
Nada de eso ocurrió. Más bien definió los sucesos como “una atrocidad” y que les entregaron el cuerpo a cajón cerrado.
También dijo que el informe de la autopsia describe que “fue terrible toda la marca que tenía en su cuerpo. Los golpes le produjeron una trombosis y un paro cardiorrespiratorio”
“Mi hija se quedó sin padre. Hace seis meses esperamos que vuelva, esperamos su llamado. Era una persona excepcional, un deportista, un padrazo, un laburante, él no consumía, nunca tuvo antecedentes. Nos arrebataron de las manos, porque nosotros no vimos. Ni siquiera tuvimos la posibilidad de verlo”, reclamó.