La localidad de James Craik aportó nueve jóvenes soldados a la Guerra de Malvinas, pero algunos vecinos sintieron que no habían recibido nunca el reconomiento merecido.
“Nunca se les hizo un homenaje”, contó Bárbara Parmeggiani
Para remediar lo que consideraban era una falta imperdonable, de noche, casi de sorpresa, un grupo de jóvenes pintó un mural en una pared cercana al Concejo Deliberante de James Craik.
Con una leyenda simple, “Las Malvinas son Argentinas”, un dibujo de las islas, y los apellidos de cada uno de los veteranos, cumplieron con su misión de recordarlos y homenajearlos.
Parmegginani contó también que la idea es llegar a levantar un monumento, pero querían comenzar con este mural.