Apenas conocidas las primeras tendencias que daban a Alberto Fernández ganador en primera vuelta, algunas personas en moto pasaron frente al local de Juntos por el Cambio tocando bocina y cantando a favor del candidato vencedor.
Las situaciones se repitieron durante la noche. Algunos automovilistas frenaban, tocaban bocina, y profería insultos en contra del presidente Mauricio Macri y provocaciones hacia las personas que estaban dentro del local.
Desde uno de los autos levantaron el volumen de su equipo de sonido, donde sonaba la marcha peronista, y gritaron insultos.
En el interior del local estaban varias de las personas que había fiscalizado la elección, periodistas y dirigentes del partido.
La conducción local de Juntos por el Cambio fue clara frente a su gente al pedirles no responder los agravios.
Paradójicamente, minutos antes, a pocas cuadras de allí, el intendente Martín Gill le había pedido a la militancia reunida en el PJ dejar atrás la grieta y los enfrentamientos.
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Las situaciones, que se dieron varias veces, se sumaron a los daños sufridos por el frente del local durante la madrugada previa a los comicios.
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