Un contingente del nivel primario de una escuela villamariense tuvo que suspender el viaje porque el chofer dio positivo al test de alcoholemia y no había reemplazo.
El hecho ocurrió en la madrugada de este jueves 17, cuando un grupo de niños y niñas que asisten a una escuela primaria de la ciudad esperaba para partir.
Sin embargo, el viaje se vio frustrado porque el único chofer que había no estaba en condiciones para manejar.
Cuando personal municipal llegó al lugar para hacer el test de alcoholemia al conductor previo al viaje y poder autorizarlo, se encontraron con el resultado positivo.
De acuerdo a lo que indicaron fuentes oficiales a Villa María VIVO!, el chofer tenía 0,45 de alcohol en sangre.
La tolerancia en rutas cordobesas es de cero, y más teniendo en cuenta que quienes viajaban eran niños y niñas.
El otro problema que se sumó es que la empresa que los llevaría no tenía otro chofer disponible.
Por ello, el viaje no pudo ser.
