El remisero que se suponía desaparecido, había recorrido las Sierras de Córdoba y llegado hasta San Juan.
Todo esto lo hizo, según se cree, por su propia voluntad y engañando a quien le había dado el trabajo de chofer unas semanas antes.
Por eso, la fiscalía de Tercer Turno a cargo de René Bosio ordenó su detención e imputación por el delito de estafa.
Una vez que pudieron localizar el teléfono celular del conductor, dieron con su recorrido y ubicación.
Pablo Antonio Rivero, de 28 años de edad, había salido desde Villa María días atrás con su supuesto viaje a Buenos Aires, primero, y luego, en el cambio de vuelta, había dicho que llevaba otras dos personas hacia Córdoba.
Según pudo establecer la investigación, el hombre nunca hizo esos viajes.
Lo que se detectó es que estuvo en Alta Gracia y en Carlos Paz, pasando por varias localidades de las Sierras de Cordoba.
Luego, se dirigió a San Juan capital, donde fue detenido por la policía sanjuanina, a pedido de la Justicia cordobesa.
Si bien en un primer momento se pensó que le había ocurrido algo, luego la hipótesis cambió.
El chofer había desaparecido el día 17 de julio.
Fue localizado en San Juan en la tarde del lunes 25 de julio.
