El mítico espacio y símbolo arquitectónico local “Chalet Scopinaro” será recuperado por el colectivo teatral “Teatro de Herejes”. Buscan convertirlo en un espacio multidisciplinario y mantener el patrimonio cultural y artístico del lugar.
“Es un chalet de la aristocracia y lo toman los herejes”, cuenta el director y coordinador del colectivo, Andres Brarda, en relación a quien era Scopinaro.
El Teatro de Herejes es un colectivo cultural que se conformó como asociación civil hace dos meses, aunque realizan obras desde 2015. En un nuevo desafío decidieron alquilar el famoso espacio, construido en 1930, para convertirlo en un centro cultural.
“Nos encontramos con un espacio destruido”
En diálogo con Brarda, relató que al ingresar se encontraron con un espacio destruido y deteriorado. “Le han robado las puertas internas, le han quitado todos los postigones, no tiene seguridad la casa, al entrar agua las paredes están llenas de humedades”, dijo.
Los integrantes de la asociación civil son 23 y unos de ellos es arquitecto, por lo que decidieron realizar un trabajo de reconstrucción. La prioridad es el cuidado y la restauración de la fachada.
“Nos pareció un factor no menor, ser un grupo artístico de vanguardia, que siempre piensa espacios no convencionales para sus puestas y ser nosotros los que tomemos e irrumpamos al ‘primer aristócrata’ de Villa María, como se lo conoce al chalet”, relató.
¿Cómo funcionará el espacio?
La idea del colectivo es convertirlo en un espacio multidisciplinario, donde prioricen al teatro. Abrirán convocatoria a toda la comunidad artística para ser parte de la agenda con funciones, talleres, seminarios, congresos y charlas.
Brarda explicó que al realizar un “teatro no convencional” planean utilizar las habitaciones para desarrollar las más de 6 obras que están realizando actualmente. La inauguración está prevista para marzo de 2020, cuando terminen de acondicionar el lugar.
Buscan el apoyo de la comunidad
“Necesitamos el apoyo de la comunidad villamariense, de los gobiernos e instituciones”, dijo el director. Este fue uno de los motivos por lo que decidieron convertirse en una asociación civil.
Al respecto, dijo: “A través de esta figura comenzamos a recibir apoyo de instituciones privadas que confían en nuestro trabajo, sin dudas vamos a aplica a subsidios, becas, convocatorias y a cuánto apoyo municipal, provincial, nacional exista y que nos permita seguir adelante con este proyecto”.
Desde el colectivo abrieron la invitación a personas, empresas u organizaciones que quieran aportar recursos para poner en marcha el famoso edificio de Lisandro de la Torre y Salta.
“Somos conscientes que estamos abriendo a los villamarienses y a la región un edificio que es patrimonio arquitectónico de la ciudad, al cual pretendemos conservar y mantener en su valor histórico, no solo será para la comunidad artística sino para todo el que quiera acercarse y ser parte de esta nueva experiencia que proponemos desde Teatro de Herejes”, enfatizó.
Fotos: Jorge González y Teatro de Herejes