Siete detenidos en la madrugada adentro del viejo Hospital

En la madrugada de este miércoles 13, otras siete personas más fueron detenidas en el interior del viejo edificio del Hospital Pasteur, que se encuentra en su mayoría desocupado desde la mudanza a la nueva sede.

En los últimos días se registraron cuatro intervenciones de la Policía para aprehender a jóvenes, algunos mayores y otros menores de edad, que ingresan al ex centro de salud con fines que no están determinados.

Los casos más recientes fueron por un lado en la medianoche del martes, detuvo a dos jóvenes de 20 y 19 años, según se confirmó desde la Policía.

Poco más tarde, cerca de las 2:00, los vecinos volvieron a llamar al 101 diciendo que otra vez habían ingresado personas. En este caso, según se informó desde la Policía, fueron cinco adolescentes (dos de 17 años y tres de 16 años).

Todos fueron trasladados a sede policial e imputados como supuestos autores del delito violación de domicilio. Además, al joven de 19 años fue imputado como supuesto autor del delito resistencia a la autoridad.

En la tarde del martes, alrededor de las 17:30 horas, personal de la patrulla preventiva realizó en torno al edificio un operativo cerrojo y logró aprehender a un menor de 16 años de edad, que se hallaba momentos en el interior del edificio.

Anteriormente, se habían dado otro caso caso de jóvenes dentro del lugar.

¿Fantasmas?

Desde la Policía mostraron preocupación por lo reiterativa de la situación. Hasta ahora no se han detectado mayores roturas que las que se provocan en algunas abertura para ingresar al lugar, pero no se trata aparentemente de hechos de robos.

Se viralizó como una travesura la realización de un video por partes de jóvenes que ingresaron al edificio donde supuestamente se dan con la presencia de “fantasmas”.

Peligros

En el caso de las intervenciones nocturnas, dentro del edificio no hay iluminación y hay sectores que, por su deterioro, están en riesgo de desmoronarse. De hecho, hay una tapia que da a calle Tucumán que se derrumbó en una de las últimas tormentas de viento.

A esto se suma que cuando los policías ingresan al lugar a verificar los llamados de vecinos que alertan sobre presencia de personas, pueden darse situaciones de mayor complicación en el intento de aprehender a los jóvenes.

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