Un líder de la Iglesia Mormona de Bell VIlle fue acusado de abusar sexualmente de dos niñas de 11 años en el 2017 y seguirá detenido. Daba clases a nenes de entre 7 y 11 años.
Seguirá detenido uno de los líderes de la Iglesia Mormona acusado de abuso sexual de dos nenas de 11 años, siendo su “maestro”.
Se trata de Nelson Bogero, y el Juzgado de Control confirmó la prisión preventiva contra el acusado por los hechos ocurridos en 2017.
El hombre tenía acceso a las menores a través de clases que organizaba junto con su pareja, según informó El Doce.
Un integrante de la Iglesia Mormona de Bell Ville permanece detenido por abusos sexuales contra menores.
Preso en Villa María
La investigación se impulsó por los hechos padecidos por dos niñas de 11 años en 2017.
Las denunciantes sospechan que pueden existir más casos similares.
El líder mormón continúa preso en la cárcel de Villa María.
En los últimos días, el Juzgado de Control logró confirmar la resolución de la fiscal Isabel Reyna, quien dictó en marzo la prisión preventiva contra el sospechoso.
¿De qué se lo acusa?
La imputación es por abuso sexual doblemente agravado por la edad de las víctimas y la relación de “maestro” que Bogero tenía con las nenas.
Esto fue explicado por el abogado Hugo Pérez, quien formuló la denuncia del caso, a ElDoce.tv.
Además, el letrado indicó que las actividades que realizaban le facilitaban el acercamiento a las menores afectadas.
El imputado, Nelson Bogero, tiene 70 años de edad.
Según la palabra de Pérez, “estamos peleando para que cumpla la prisión en el penal”.
Horror y cinismo
Las niñas abusadas eran compañeras en las “clases dominicales” que Bogero organizaba junto con su pareja para niños de entre 7 y 11 años.
La mamá de una de las víctimas contó en Noticiero Doce que Bogero “realizaba una actividad en la que iba a sacar un par de fotos a las niñas para una revista de la iglesia. Ahí aprovechó la situación y abusó”.
Expresó que comenzó a observar cambios en las conductas de su hija que le generaron preocupación.
Finalmente la menor le confió a una tía lo sucedido.
La mujer manifestó que uno de los líderes de la iglesia, que a su vez es cuñado del imputado, intentó convencerla para que no hiciera la denuncia pero ella continuó con la acción judicial.